Charlie Hebdo y el cobijo de los populismos

Si te atacan con un arma, devuélveselo con un empleo digno, un techo, un médico, una escuela, un plato de comida caliente, una oreja bien abierta para escuchar sus penas y un gran abrazo. Esta mañana un pequeño despiece del periódico La Vanguardia explicaba algo imprescindible (...)

Por Mariana Vilnitzky