Surgen múltiples iniciativas internacionales para acabar con dolencias que han sido abandonadas por los laboratorios.

El sector farmacéutico ha ido ganando relevancia: entre 1995 y 2019 creció a un ritmo de más del doble que la media de la industria manufacturera: el 5,6%, frente al 2,1% anual, medido en valor añadido bruto (VAB). Entonces llegó la pandemia, catastrófica para la mayoría de sectores, pero no para todos.

Los médicos críticos siguen apuntando que el marketing farmacéutico conduce las pautas de prescripciones, a pesar de los códigos deontológicos y de transparencia.