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Mejor llamarse Natalia que Samira

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Enero 2016 / 32

Discriminación: Los currículos de los ciudadanos de confesión musulmana o judía en Francia están más penalizados que los de los afroamericanos en EE UU.

Musulmanas en la mezquita de Estrasburgo. FOTO: PARLAMENTO EUROPEO

Una investigación con 6.231 CV muestra diferencias notables 

“Con una cualificación idéntica, Mohammed tiene que enviar cuatro veces más currículos (CV) que Michel para lograr una entrevista de trabajo. En Francia, la penalización que sufren los musulmanes para acceder a un empleo es seis veces superior a la que encuentran los afroamericanos en relación con sus homólogos de raza blanca en Estados Unidos”, afirma Marie-Anne Valfort , profesora e investigadora en la Escuela de Economía de París y en la Universidad París I. 

Con el apoyo del Instituto Montaigne (1), un think tank liberal, esta profesora ha realizado una prueba: enviar 6.231 CV ficticios como respuesta a ofertas de trabajo reales para trabajar como contable. La práctica religiosa, ya sea judía, musulmana o católica, de los candidatos al empleo se sugería en los nombres inventados (Esther, Dov, Mohammed, Samira, Michel y Natalia), en su escolarización en una escuela religiosa y en las actividades que constaban como afición, por ejemplo scouts católicos, judíos o musulmanes. Todos constaban como procedentes del Líbano, donde se suponía que habían obtenido la nacionalidad francesa, y obtuvieron su grado escolar o un diploma de técnico superior (BTS en sus siglas en francés) en Francia.

Resultado: el 20,8% de los candidatos católicos fueron convocados a una entrevista. Pero en el caso de los judíos, el porcentaje bajó al 15,8%, y en el de un musulmán, al 10,4%. 

No influyó el hecho de que los CV de los musulmanes reflejaran excelencia académica. Sus posibilidades de ser contactados no mejoraban por ello (salvo en el caso de las mujeres). Por el contrario, aumentaba sus posibilidades el hecho de introducir algún elemento de laicidad en el currículo.

Incluir elementos de laicidad mejora las expectativas

El Gobierno lanza una campaña antidiscriminación

Practicar el islam despierta entre los seleccionadores de empleo estereotipos de insubordinación, de proselitismo, de extremismo y de desigualad de trato con relación a las mujeres, ha concluido la investigadora.

¿Cómo puede combatirse este tipo de discriminación?

La generalización del CV anónimo ha sido enterrada. Fue obligatoria por ley en 2006, sin que los decretos que debían desarrollar la ley se elaboraran nunca, y desde el pasado mes de agosto se ha convertido en opcional. La eficacia de la iniciativa ha sido relativa, según numerosos estudios, como Evaluación del CV anónimo (2). 

 

JUSTICIA DEL SIGLO XXI

Para luchar contra la discriminación en la contratación, el proyecto de ley bautizado como Justicia del siglo XXI pretende desarrollar acciones colectivas, siguiendo el modelo de las class actions de Estados Unidos. Pero se trata de sancionar a posteriori a las empresas.

Marie-Anne Valfort propone, por su parte, subvencionar la contratación de las minorías claramente discriminadas. Una pista que “sólo compromete a la autora de la investigación”, precisa el Instituto Montaigne.

El primer ministro, Manuel Valls, ha anunciado una nueva campaña para identificar las prácticas discriminatorias en las empresas de más de 1.000 empleados. Se esperan los resultados a mitad de 2016.

(1). “Discriminations religieuses à l’embauche: una réalité”, disponible en Internet en https://lc.cx/44jW
(2). “Evaluatión del CV anonyme”, disponible en https://lc.cx/44VF, e informe sobre la lucha contra las discriminaciones en la empresa (https://lc.cx/44jZ).

 

PARA SABER MÁS

Les embarras des recruteurs, por Emmanuelle Marchal, EHESS, octubre 2015.