Un sistema que se tambalea

Telefónica es, según una sentencia del Juzgado de lo Social número 12 de Barcelona, responsable de un sistema de subcontratación irregular en el que mantiene falsos autónomos.

Protesta de la Marea Azul en el Mobile World Centre. FOTO: ANDREA BOSCH

Telefónica y su empresa subcontratada Cobra (Grupo ACS) son responsables de mantener falsos autónomos en su sistema de trabajo. Así lo ha dictado el pasado 21 de diciembre la jueza de lo social Amaya Olivas Díaz, quien reconoce que “la relación laboral ha quedado sobradamente acreditada (...). Declaro la existencia de relación laboral y prestación de servicios entre Cobra Instalaciones, SA (y de forma solidaria Telefónica de España, SAU), y los trabajadores codemandados”.

Esta es la primera sentencia de una serie de juicios relacionados con la megainspección de trabajo que en mayo de 2016 llevó a cabo la Generalitat de Catalunya. Entonces, la inspección sancionó a Telefónica y a su cadena de subcontratación (en el que hay involucradas diez empresas grandes —Abentel, Abengoa, ITC, Cobra, Cotronic, Liteyca, Teleco, Elecnor, Montelnor y Comfica— y un centenar de microempresas a su vez subcontratadas por éstas). Dichas compañías mantenían asimismo a 332 trabajadores con irregularidades en su relación laboral. En concreto, se dictaminaron entonces 219 propuestas de sanción por infracción de la normativa sociolaboral, por un importe de 2,15 millones de euros; 21 actas de liquidación de cuotas a la Seguridad Social por valor de 3,61 millones y 198 altas en el Régimen General de la Seguridad Social y 92 contratos temporales transformados en indefinidos.

La inspección de trabajo dictaminó que Telefónica debía pagar 3,7 millones de euros como responsable subsidiaria, y el resto (2,6), entre las otras empresas. 

Ante esta situación, las empresas recurrieron y la Tesorería de la Seguridad Social fue finalmente la que interpuso una serie de demandas ahora en marcha. Los sindicatos no saben con certeza cuántos juicios están en curso y la Tesorería afirma que estos datos no son públicos. “No se suelen dar informaciones de nuestra acción judicial, y menos de una empresa en particular”.

UN PRECEDENTE

Esta no es la primera sentencia de España que declara como irregular un tipo de funcionamiento laboral que es moneda corriente. El mismo texto de la sentencia se basa en otro conflicto, de 2002, en el que el Tribunal Supremo declaró ilegal el funcionamiento de las subcontratas en la relación laboral con los trabajadores.

En 2002 el Tribunal Supremo declaró ilegal un caso homólogo

Los sindicatos y la Marea Azul esperan una “cascada” de sentencias

En Zaragoza otra inspección de trabajo insta a pagar 2,5 millones

“Ha habido más sentencias”, agrega Jordi Juan, abogado del Col·lectiu Ronda que ha estado relacionado con la defensa de trabajadores de Telefónica durante la gran movilización que se llevó a cabo en 2015 (véase más adelante). “Esta sentencia de ahora es más importante, justamente por la magnitud de lo que hay detrás, los 332 expedientes de la inspección de trabajo. Pone en claro entredicho el modelo de precariedad laboral. Un modelo que Telefónica usa de forma masiva”.

La sentencia puede afectar también a otras situaciones similares a la que se enfrentan trabajadores de subcontratas de otras grandes compañías como Endesa o Gas Natural. El sistema de subcontratación es siempre el mismo.

Los sindicatos mayoritarios Comisiones Obreras y UGT, y los miembros de la asociación Marea Azul, que estuvieron detrás de las huelgas de 2015, esperan que esta primavera caiga “una cascada de sentencias”, contra Telefónica y las subcontratas. Según explica Comisiones Obreras, en Zaragoza, la empresa Cotronic, subcontratada —y la misma Telefónica—, debería pagar, si pierde, otros 2,5 millones de euros por una treintena de trabajadores que han estado como falsos autónomos, según otra inspección de trabajo.

Comisiones agrega que actualmente se encuentran pendientes de sentencia al menos otros tres juicios en Tarragona y Cádiz.

Según CC OO, hay otros juicios al menos en Cádiz y Tarragona 

Telefónica insiste en que no hay relación contractual

“No hay relación laboral entre los codemandados y la empresa”, se indica en Telefónica. “Hemos recurrido la sentencia porque no hay ningún tipo de relación contractual. Son personas que trabajan de forma independiente”.

El conflicto se encuentra ahora en el Tribunal Superior de Justicia de Catalu-nya. Si todavía no se llega a un acuerdo, el próximo paso sería el Tribunal Supremo, que en última instancia definiría si es o no legal el sistema generalizado de subcontrataciones. 

MOVILIZACIÓN SINDICAL

Las inspecciones de trabajo se llevaron a cabo tras las ‘Correscales’ de la Marea Azul

La asociación Marea Azul, formada por trabajadores de estas subcontratadas (véase el artículo de Alternativas Económicas, número 34, “Telefónica, el conflicto continúa”), se ha movilizado en 2015 y 2016 para hacer visible esta lucha. Sus miembros fueron los encargados de llevar adelante varias huelgas y el llamado “Correscales”, una carrera de relevos que recorrió de Bilbao a Barcelona buscando dar visibilidad al conflicto laboral. 

En paralelo, los sindicatos tradicionales, Comisiones Obreras y UGT, trabajan desde entonces y hasta la fecha en los convenios del sector. Al principio de las conversaciones los sindicatos calculaban que había un 70% de autónomos (falsos) y un 30% de personal contratado. A raíz de la huelga se firmó un acuerdo por el que en las subcontratas de Telefónica se comprometían a revertir la situación para enero de 2018; es decir, un 30% subcontratado y un 70% en plantilla. “Está pendiente aún la revisión de los datos para verificar el cumplimiento del acuerdo, y nos estamos reuniendo para negociar”, explica CC OO. “Hay 52 provincias, y conflictos distintos en cada una. Ni siquiera sabemos cuántos juicios hay, pero creemos que sentencias como la de Barcelona ayudarán en las negociaciones”.

Para los miembros de Marea Azul, todavía se sigue dejando gente fuera de los acuerdos. “Por ejemplo, a los trabajadores de planta externa (los que tiran los cables de Telefónica que pasan por las calles) no los han incluido”, se queja Aitzol Ruiz, miembro de la asociación y uno de los trabajadores afectados.
“Sin la movilización de la Correscales no hubiéramos ganado este juicio ni otras mejoras que hemos conseguido”, agrega Ruiz. “En muchos lugares de España se llegaron a acuerdos, y sí que hubo mejoras, pero no todo se está cumpliendo y esta es una lucha que tendremos que continuar siempre. En el momento en que bajemos la guardia, retrocederemos”.

Los trabajadores de Marea Azul saben bien que sus movilizaciones tienen poder. Según explican, a finales de 2016, en medio de varias concentraciones, César Alierta, presidente de Telefónica hasta 2017, llegó incluso a salir a la calle en Zaragoza para hablar en persona con los manifestantes.