Basta citar uno de los lemas del Gobierno de Rafael Correa para entender lo que ha pasado en los seis años que lleva en el poder: “El país ya es de todos, sobre todo, de los pobres”. Y la verdad es que no es un lema hueco, pues entre 2006 y 2012, la pobreza en el Ecuador pasó del 37,6% al 27,3% y la pobreza extrema fue del 16,9% al 12,2%, en el mismo período.