Los impuestos más urgentes en el peor momento
Los tributos ambientales, que mandan señales de cómo producir y consumir, no pueden esperar, pero requieren compensaciones por su gran coste social.
Desde que en las tiendas no salen gratis las bolsas de plástico, que se fabrican con derivados del petróleo, se usan un ratito y tardan más de medio siglo en descomponerse, es habitual ver a la clientela reutilizar la misma o plantarse en caja con una de tela. Solo en el primer año transcurrido desde que se cobra por ellas, en verano de 2018, su consumo cayó el 24%.
Si se le pregunta a la gente, más de la mitad —sobre todo la más joven— dice que combatir la emergencia climática con impuestos resulta "bastante o muy eficaz",...