Lo que no existía
El 7 de noviembre de 2000 estuve en Austin, Texas. Llovía y hacía frío. Mediada la tarde, una multitud mojada empezó a apiñarse frente al Capitolio estatal. Eran republicanos que confiaban en la victoria de su candidato, George W. Bush, un hombre que propugnaba una cosa llamada “conservadurismo compasivo”.