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25 años de REAS: una historia de valores

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Junio 2020 / 81

Fotografía
REAS

La Red de la Economía Solidaria celebra su cumpleaños renovando su compromiso de trabajar en favor de las personas y de la sostenibilidad ambiental.

Estos 25 años que cumplimos como red promocionando una economía solidaria nos invitan a mirar a nuestros orígenes y a evaluar el camino recorrido hasta aquí. Este aniversario puede ser un pequeño homenaje a aquellas personas que iniciaron el camino de la Red de la Economía Solidaria (REAS) y fomentaron sus pequeños brotes de organización. El mérito de aquellas personas, de aquella inicial red, fueron principalmente dos: en primer lugar, clamar contra un sistema explotador de recursos, de personas y de pueblos y, a la vez, demostrar de manera práctica la posibilidad y necesidad de desarrollar  otra economía al servicio de las personas y de la sostenibilidad ambiental.

REAS nace con estos objetivos en  la ciudad de Córdoba en mayo de 1995, bajo el impulso de algunos centros de inserción sociolaboral y diversas iniciativas soc iales dedicadas al reciclaje de residuos, al comercio justo y la mensajería en bicicleta en el marco del Primer Encuentro de Economía Solidaria organizado por IDEAS.

Durante los primeros años se dio un lento crecimiento de la organización, pero, sobre todo, se produjo la consolidación de unos criterios éticos que han marcado una forma de actuación y unos valores diferentes a los de la economía capitalista. Fue en estos comienzos cuando, junto con iniciativas sociales de Francia y Bélgica, elaboramos la Carta de la Economía Solidaria, instrumento en el que vertebramos nuestros principios como entidades y como red, y que nos ha acompañado y ha sido adaptado conforme a la evolución del pensamiento de REAS y de la sociedad.

 Curso de formación de REAS Madrid.

 Toni Pons, socio fundador de REAS.

Estos principios de equidad, trabajo, sostenibilidad ambiental y cooperación, sin fines lucrativos y compromiso con el entorno, son el punto de partida de otro instrumento que  surgió de manera inmediata: la auditoría social, un sistema de evaluación de las prácticas de REAS en las organizaciones con estos criterios y herramienta para corregir los errores que en dichas prácticas se puedan cometer. Con estos instrumentos REAS consolida una base esencial para su fortalecimiento.

Nueva estructura territorial

A principios del año 2000 tuvo lugar en Málaga una asamblea para dotar a REAS de una nueva estructura que reflejara el desarrollo territorial de la red. Al integrar dichas realidades (Euskadi, Navarra, Canarias y Aragón fueron las primeras comunidades en hacerlo), REAS empieza a trabajar territorialmente y a coordinarse desde esta óptica. Se aprueba en esta asamblea una estructura básica coordinativa en la que pueden participar también los centros, a condición de que estos, en la medida de lo posible, trabajen para constituirse en red territorial.

La red está presente en en múltiples sectores de actividad

Nace así REAS Red de Redes, agrupando a unas 70 iniciativas y con un deseo de enredar y acoger a todas las redes que trabajaran desde la economía solidaria desde la convicción de que el crecimiento de este sector sería lento  pero imparable. A las redes sectoriales ya existentes, como AERESS (Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria) y la coordinadora de mensajeros en bicicleta, le acompañarían otras actividades económicas sectoriales, como poco después ocurrió con la incorporación de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo.

Se van así agrupando bajo su paraguas multitud de actividades de todo tipo: reciclaje de residuos, turismo rural, mensajería, formación para la inserción laboral, agricultura ecológica, comercio justo, restaurantes ecológicos, educación ambiental…, toda una variedad de actividades económicas  que empiezan a dar darle a la red una identidad y una sólida base para su consolidación y posterior crecimiento.

 Dos momentos de la Feria de Economía Solidaria de Barcelona. Fotos: REAS y Andrea Bosch

En esta primera década de trayectoria hubo actividades y acciones destacables para la historia  de la red y el movimiento en favor de la economía solidaria. En primer lugar, es destacable la participación en las negociaciones con el Ministerio de Trabajo para la legalización de las empresas de inserción, entidades ya existentes en la realidad de nuestros territorios, pero que carecían del correspondiente marco legal que las amparara y apoyara. Así mismo, fue clave para la consolidación de este proceso, la participación y apoyo en Idearia (jornadas bienales de economía alternativa y solidaria que tenían lugar en Córdoba organizadas por IDEAS (y que luego pasaría a coorganizar). Es producto de estos tiempos también la elaboración y distribución de la revista Idearia, así como la edición de dos libros de economía solidaria: Las otras empresas y Rescata tu dinero. Por último, tuvo lugar en estos años la puesta en marcha en algunas provincias de préstamos solidarios para apoyar iniciativas de economía solidaria.

Reas Red de Redes  hoy

El crecimiento de REAS Red de Redes a lo largo de estos 10 años últimos ha sido muy positivo. Entre sus méritos me gustaría resaltar el desarrollo sectorial de la red, y en especial de la Mesa de Finanzas Éticas, que integra proyectos de gran impacto como Fiare, que en su unificación con la Banca Popolare Etica de Ética de Italia se convierte en banco con más de 42 .000 socios y socias, y COOP57, cooperativa de crédito para entidades socias que necesiten inversión para nuevas  iniciativas (siempre bajo los criterios cooperativos y de la economía solidaria) que este año cumple también su 25 años.  Por último, es destacable la constitución de la sectorial de Unión Renovables integrada por 18 entidades dedicadas a las energías renovables, que cuenta con 85.300 socios. Por su parte, las viejas sectoriales como Aeress y Comercio Justo han doblado el conjunto de sus entidades.

REAS tiene hoy 800 entidades y 5.400 trabajadores

A todo ello hay que añadir la existencia de REAS en 15 de las 17 comunidades, redes territoriales integradas en la Red de Redes que agrupan a casi 800 entidades, más de 20 mil trabajadores y trabajadoras, y más de 24 mil voluntarios y voluntarias. Bajo esta estructura y desde estos orígenes, REAS pretende dar respuesta a los graves problemas de desigualdad y deterioro que sufrimos y a los que humildemente  hemos ido haciendo frente en estos años. Es un camino emprendido que, no obstante, necesitará aún de muchos más abrazos colectivos para seguir construyendo esta senda de solidaridad. Los esperamos con los brazos abiertos.