15. Redes sociales
La explosión de las redes sociales y el uso de Internet han multiplicado el rastro que los ciudadanos van dejando sobre sí mismos. Esta información pasa a ser propiedad de la empresa que gestiona la plataforma sobre la que operan los ciudadanos (llámese Facebook, Google o Twitter) y pueden explotarla con fines comerciales o ponerla eventualmente a disposición del Gobierno que lo solicite. Algunas iniciativas tratan de replicar las herramientas, pero salvaguardando la intimidad de los usuarios.
El prodigio de Internet nos permite zambullirnos en un pozo sin fondo de...