Salud // La batalla contra las enfermedades desatendidas
Surgen múltiples iniciativas internacionales para acabar con dolencias que han sido abandonadas por los laboratorios.
Ya se trate de las vacunas o de los test, la lucha contra la covid-19 ha mostrado que el repliegue nacionalista es más duro que el acero. Sin embargo, desde hace dos décadas y en la estela de la lucha contra el VIH-sida, han surgido una serie las iniciativas para organizar la cooperación internacional en lo referente a investigación y desarrollo (I+D) en sanidad. Estas estructuras, denominadas PDP (product development partnerships o asociaciones para el desarrollo de productos) son una reacción frente a las desigualdades de acceso a los tratamientos médicos. A finales de la década de 1990 se comprobó que el 90% del presupuesto en I+D de los grupos farmacéuticos se dedicaba al 10% de los más ricos del planeta, mientras que enfermedades tropicales como el paludismo, la tuberculosis y la enfermedad del sueño, que representaban más del 10% de la mortalidad mundial, captaban un penoso 1% de las inversiones.
Aunque esas estructuras híbridas que son los PDP no son lo suficientemente fuertes como para...