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España: el hambre vuelve a ser problema

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Diciembre 2014 / 20

Coordinadora del European Anti Poverty Network Madrid

Objetivo incumplido: Con la crisis, el país ha registrado un fuerte aumento de la pobreza.

ILUSTRACIÓN: PERICO PASTOR

En el período de 1990 a 2015, España se ha movido en dos direcciones; de avance en la erradicación de la pobreza y el hambre, y a partir de la crisis económica de 2008, de claro retroceso, tanto dentro como fuera de sus fronteras.

Después de superar la crisis que afectó a principios de los noventa —con tasas de paro cercanas al 25% y un déficit público de más del 6% del PIB—, se inicia una “época dorada” para la economía española; pasó de generar 12 a 20 millones de empleos en el período de mayor auge; repuntó un 30% la tasa de empleo femenino y juvenil, que había sido fuertemente castigada a inicios de los noventa.


DESPUÉS DEL BOOM

Pero la incidencia de la pobreza muestra otra tendencia. Hasta antes de la crisis actual, mientras la economía crecía, la tasa de pobreza se mantuvo entre el 19% y el 20%, muy alta para el nivel de riqueza con el que convivía. A la vez, la desigualdad comenzó a aumentar quebrando la tendencia histórica de reducción de ambos fenómenos que venía de los años ochenta. El resultado de esta combinación fue el mantenimiento de situaciones de vulnerabilidad, ensombrecidas por el resplandor del supuesto milagro económico y la reducción de la capacidad protectora del Estado, que no reforzó los mecanismos de inclusión social (1).

La crisis de 2008 golpeó fuertemente a la sociedad española: un acelerado aumento del paro, que en 2014 bordea el 25%, con especial incidencia en los y las jóvenes (53%) y que no disminuirá más de dos puntos —en las previsiones optimistas— cuando el 2015 finalice. La desigualdad y la pobreza muestran el mayor aumento en un período de tiempo tan corto en nuestro país. El 27% de la población está en riesgo de pobreza y exclusión, más de 12,5 millones de personas.

Incluso en el boom la tasa de pobreza se mantuvo en el 20%

En los últimos 10 años, el 4,5% de la población ha pasado hambre

La pérdida del poder adquisitivo ha sido una característica emblemática de los años de crisis; el ejemplo más dramático son los hogares sin ingresos: más de 700.000, en los cuales se estima que viven alrededor de 1,5 millones de personas, sin percibir ingresos de salarios, rentas o prestaciones sociales de ninguna especie. El fenómeno del hambre, que en España se entendía cuasi extinto, ha vuelto a surgir. En el VII informe de FOESSA se registra que el 4,5% de la población ha pasado hambre en los diez últimos años con frecuencia, o la está pasado ahora, casi el doble que en 2007.

España, en el escenario mundial, sigue estando en la zona de países desarrollados. Pero una parte cada vez más importante de su población está viviendo en condiciones de pobreza intolerables. Si el espíritu de este objetivo es mostrar el compromiso de los gobiernos por disminuir la pobreza extrema, lograr el pleno empleo y reducir el hambre, el resultado del último período en España es un movimiento a la inversa. La población más vulnerable está en una situación de enorme gravedad. La lucha contra la desigualdad y la pobreza es ahora urgente y necesaria, pero se desenvuelve en un contexto cada vez más hostil.

(1) L. Ayala, 121 nuevas propuestas para nuevos tiempos, EAPN ES, Madrid, 2012, p. 26.

 

LAS METAS

Meta 1A "Reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, el porcentaje de personas cuyos ingresos sean inferiores a 1 dólar por dñia" (hoy es 1,25 dólares).

Meta 1B "Lograr empleo pleno y productivo, y trabajo decente para todos, incluyendo mujeres y jóvenes".

Meta 1C "Reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, el porcentaje de personas que padece hambre".