Nuestra salud depende de los microbios
Una buena relación con las formas más discretas de biodiversidad es esencial en la vida.
Los microbios están por doquier, y la vida de los grandes organismos está fusionada con la suya. Nuestra salud depende de nuestras buenas relaciones con las formas más discretas de la biodiversidad.
Aunque los elefantes, los árboles y los seres humanos desaparecieran del planeta, ellos permanecerían. Las bacterias, los virus, los hongos y las algas están presentes en la Tierra desde hace 3.800 millones de años y se encuentran en todas partes, hasta en nuestros intestinos y nuestra piel. Es frecuente temerlos. Sin embargo, las investigaciones demuestran que el contacto estrecho con los microorganismos es imprescindible para la vida, tanto de los animales como de los vegetales.
Digestión, inmunidad, control de las sustancias tóxicas… las simbiosis con los microbios son cruciales para los grandes seres vivientes. Ello es tan cierto que dos fenómenos fundamentales para la vida proceden de esos microorganismos: la fotosíntesis y la respiración son posibles únicamente gracias a la lejana simbiosis de las células vegetales y...