Impulso // El cooperativismo relanza su alternativa
El encuentro mundial organizado por Coceta en Sevilla reúne a los principales actores internacionales del modelo, que se postula para afrontar mejor las crisis.
Ante tiempos convulsos, las cooperativas, enseña de la economía social, proporcionan seguridad y capacidad de responder a las necesidades de las personas que no dan las empresas de capital. Venimos de esa certeza, corroborada tras el peor año de pandemia, y eso nos anima aún más a posicionarnos como parte imprescindible de las soluciones reales ante los retos de este mundo en crisis: la creciente y expansiva desigualdad, las consecuencias de una globalización mal entendida en materia de sostenibilidad, la mala calidad del trabajo, el reto demográfico, la digitalización apropiada…
Por ello, desde la Confederación Española de Cooperativas de Trabajo Asociado (COCETA) nos animamos a organizar el Encuentro Mundial del Cooperativismo cuando la Alianza Cooperativa Internacional (ACI) optó por celebrar su asamblea general, esta vez electoral, en España. El lema de las jornadas, que reunieron en Sevilla a casi un millar de personas procedentes de más de 60 países el pasado junio, no podía ser más oportuno: Cooperativas: el momento es ahora.
Así, durante cuatro días se sucedieron distintas actividades: político-institucionales, talleres temáticos, visitas a cooperativas, sesiones de networking y reuniones paralelas, todo ello combinado con cultura y gastronomía locales.
El argentino Ariel Guarco, reelegido en la ACI
En tiempos convulsos, el modelo ofrece seguridad
El acto más concurrido fue el de la apertura oficial, que inauguró la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, tras la bienvenida de Antonio Muñoz, alcalde de Sevilla, y que contó también con la intervención de la presidenta de Cooperatives Europe, Susanne Westhausen, y de los presidentes de la ACI y COCETA, Ariel Guarco y Luis Miguel Jurado, respectivamente.
"Fuerza transformadora"
Durante la bienvenida, Antonio Muñoz destacó el “prestigio internacional” de una cita como esta y recalcó que la solidaridad está “en el ADN de las cooperativas”, ya que su razón de ser es distribuir la riqueza generada de forma mucho más equitativa, “como un modelo basado en la comunidad”. Por su parte, Díaz incidió en la “enorme fuerza transformadora” de las cooperativas y su “aporte fundamental a la reducción de las desigualdades, al trabajo decente y al respeto empresarial por el medio ambiente”.
La vicepresidenta se refirió a las acciones que el Gobierno está realizando en este ámbito, como la actualización de la Ley de Cooperativas de 1999, en la que aseguró que se están integrando “nuevas expresiones del cooperativismo”; o el recién aprobado PERTE de la economía social y de los cuidados, “que implica a 13 ministerios y que cuenta con una dotación económica de 808 millones de euros, o a las diversas medidas adoptadas para el “reconocimiento, visibilidad y participación institucional” en el ecosistema de la economía social y el cooperativismo.
Para la presidenta de Cooperatives Europe, Susanne Westhausen, el potencial del modelo cooperativo es un “factor de transformación positiva para la ciudadanía en tiempos de necesidad” y sus valores son “sólidos para el negocio y atraen a los clientes”.
Por su parte, el argentino Ariel Guarco, quien sometía su cargo a la reelección que en la asamblea vespertina se constató, logrando más votos que los otros dos candidatos juntos, la australiana Melina Morrison y el francés Jean-Louis Bancel, quiso sumarse a la oportunidad “de optimismo y esperanza” afirmando que “el momento de las cooperativas es ahora”. No en vano hay “más de 1.000 millones de personas organizadas en tres millones de cooperativas, en todos los continentes; cada una de esas cooperativas es producto del optimismo”. El electo presidente ofreció el mensaje “esperanzador” de que las cooperativas ofrecen un modelo empresarial “capaz de movilizar la potencia de la fraternidad humana, modelo centrado en las personas, que cuida a las personas y que cuida al ambiente, un modelo que pone la economía en manos de la gente”.
Las jornadas reunieron a un millar de personas. Foto: Arturo Cuenca y Anna Elías
Resiliencia
Luis Miguel Jurado, presidente de COCETA, organización anfitriona, puso de relevancia, aludiendo al lema del Día de las Cooperativas que se celebra el 2 de julio: “las cooperativas construyen un mundo mejor” gracias, precisamente, a que “el modelo cooperativo está lejos de un ecosistema empresarial al que no le importan demasiado ni las condiciones laborales, ni las condiciones medioambientales, ni el tipo de sociedades que retroalimenta”. Insistió en que la validez de las cooperativas reside “en la resiliencia y supervivencia del modelo, que resiste a los vaivenes de un mercado”.
Nuestro propósito estos días era, como apuntó el presidente, “unir a cooperativistas de todo el planeta para trabajar conjuntamente en la visibilización de nuestras propuestas, posicionando el cooperativismo ante los retos y desafíos que ya conocemos, que son globales, aunque luego requerirán de acciones específicas acordes con las distintas realidades geográficas. Y escogimos Andalucía como espacio acogedor porque siempre ha estado a la vanguardia del cooperativismo y la economía social”.
En la clausura participaron Rocío Blanco, consejera de Empleo, Formación y Trabajo autónomo, y el recién reelegido presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, ambos en funciones. Blanco puso en valor un sector que proporciona un trabajo al “10% de la población empleada del planeta en tres millones de cooperativas” y subrayó que la historia de la economía social en Andalucía es una “experiencia de éxito en generación de actividad económica y empleo”. A través de una grabación, Moreno Bonilla subrayó su apoyo al sector del cooperativismo.
Políticos de todo el espectro elogiaron al sector
La economía social tiene músculo y recorrido
Durante la jornada se celebraron talleres temáticos para analizar las posibilidades que ofrece el cooperativismo de plataforma, ante la cooperación; sobre las políticas en materia cooperativa desde la perspectiva de las administraciones públicas autonómicas y desde modelos cooperativos destacados, como el vasco Mondragón y los andaluces COVAP y COVIRAN.
Además de la Asamblea Electoral de la ACI, distintas organizaciones celebraron sus asambleas anuales en el marco del Encuentro, como la propia COCETA, nuestra socia en el territorio, FAECTA, y nuestras “hermanas mayores” en los ámbitos europeo y mundial, CECOP y CICOPA. Asimismo, se reunieron las sectoriales cooperativas nacionales e internacionales.
Todo esto no lo hizo solo COCETA; hemos contado con el apoyo en la organización de las otras entidades asociadas a la ACI (CEPES, COOPCAT, Fundación Espriu y KONFEKOOP), así como con la inestimable ayuda de la propia ACI, FAECTA y CICOPA. Igualmente, no habría sido posible sin las empresas cooperativas patrocinadoras y de las administraciones públicas implicadas.
Era la primera vez que se daba una cita como esta en España y, si algo me queda claro, es que el cooperativismo tiene músculo y mucho recorrido. Si conseguimos visibilizarnos y que cuenten con nosotras, seguro que el mundo será mejor dentro de un tiempo.
