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Otras recetas para la crisis piden paso

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Mayo 2014 / 14
Foto artículo: Otras recetas para la crisis piden paso

Elecciones al Parlamento Europeo: ¿Bofetón o aval a las políticas de austeridad? Los dos grandes partidos en el PE tienen visos de perder gas y pactar la gran coalición, en paralelo con las opciones alternativas y el refuerzo de la ultraderecha.

La efervescencia de alternativas con vistas a las elecciones europeas del 25M denota la búsqueda de otras recetas para salir de la crisis.

FOTO: UNIÓN EUROPEA 2013 - EP LOUISE WEISS BUILDING: ARCHITECTURE

La crisis financiera, la corrupción y los efectos de los recortes recorren el paisaje preelectoral de cara a las elecciones para elegir el próximo Parlamento Europeo, que se desarrollarán entre el 22 y el 25 de mayo en los 28 países de la UE (el 25M en España), cuya campaña arranca el día 9. Basta con echar un vistazo a los candidatos a poblar la única institución comunitaria que eligen directamente los ciudadanos, rearmada de crecientes competencias. Encontramos un informático capaz de robar datos para descubrir a delincuentes fiscales; un juez de discurso justiciero apartado de la instrucción del mayor fiasco financiero español, encarnado por Bankia, tras encarcelar a un banquero; un ex funcionario de prisiones secuestrado hace años por ETA; un mediático profesor de Ciencias Políticas de la mano de un ex fiscal anticorrupción, un novelista reincidente en política y jóvenes simpatizantes del fenómeno griego Syriza.

El peso arrollador de los grandes partidos (los conservadores del EPP y los socialistas del S&D), sumado a un posible horizonte de un pacto de gran coalición a imagen y semejanza del forjado en Alemania, no reduce a anécdota la presencia de Hervé Falciani (Partido X), Elpidio Silva (Movimiento Red) , Pablo Iglesias (Podemos, con Carlos Jiménez Villarejo de número dos) y José Antonio Ortega Lara (Vox). La cuestión es saber qué fuerza tendrán estos movimientos ciudadanos, que surgen en paralelo a la expansión de la ultraderecha y el euroescepticismo.

“Aunque tiene mayor visibilidad el auge de los partidos extremistas de derecha debido al papel destacado del Frente Nacional (FN) en Francia, los euroescépticos británicos de UKIP y el partido de Geert Wilders en Holanda, globalmente las formaciones no tradicionales de izquierdas y de derecha se equilibran”, señala Nicolas Véron, del think tank Bruegel, en conversación telefónica. ¿A qué se debe esta tendencia? A juicio de Véron, “muchos europeos piensan que el actual sistema no les representa y rechazan los partidos tradicionales porque creen que votarles no les da luego voz en el proceso porque estos partidos trabajan en favor de otros intereses, porque a menudo se toman las decisiones plegándose a la conveniencia de Alemania “.

Cada país es distinto, y su historia influye. No podemos hablar solo de los países del norte, de los acreedores, como fuente de fuerzas eurófobas y populistas. El tercer partido de Hungría es Jobbik, de extrema derecha, que se autodefine como nacionalista radical, en una estela similar a los Verdaderos Finlandeses, a los Demócratas suecos y el Partido del Pueblo Danés. En Grecia, lidera las encuestas la izquierda de Syriza, que propone una Europa distinta tras los estragos sociales causados por la crisis y dos rescates. En Italia, el Movimiento 5 Estrellas (M5S) ,del ex cómico Beppe Grillo, ha radicalizado su discurso antiestablishment tras su último pinchazo.

El 66% de los europeos discrepa de la siguiente afirmación: “Mi voto cuenta en Europa”, según el Eurobarómetro difundido en febrero pasado. Salvo el año pasado, nunca había sido tan elevada una sensación que tiene visos de pesar en esta contienda electoral: ir o no ir a las urnas da lo mismo.La participación en las elecciones europeas es la historia de un descenso: desde aquellos primeros comicios de 1979, en los que opinaron seis de cada diez electores, hasta los últimos, en 2009, en los que la proporción quedó en cuatro de cada diez.

 

Elección diferente

Está por ver si un envite claramente distinto como el del 25 de mayo incrementará la participación. Son las primeras elecciones europeas tras la crisis de la deuda y los rescates. Las primeras también desde que el Parlamento Europeo, habitual caja de resonancia de las causas perdidas, ha ganado poderes una vez reformado el Tratado de Lisboa. Son las primeras en las que los ciudadanos pueden influir directamente en la elección del presidente de la Comisión Europea, que según los tratados debe tener en cuenta el resultado obtenido por los partidos, a menos que los jefes de Estado y de Gobierno traicionen esos resultados. 

La última encuesta global de VoteWatch rompe el empate entre socialistas y populares que se pronosticaba, en favor de estos últimos. Ninguno de los dos alcanzaría la mayoría absoluta (376 escaños), pero su peso global, sumado al del tercer grupo, los liberales (ALDE), bajaría del 72% al 65%.

Sería una enorme sorpresa que la ultraderecha, la izquierda y los euroescépticos puros, sumados, alcanzaran más del 20% de los votos. Hoy existen siete grupos parlamentarios. Es probable que en la próxima legislatura se cree un octavo grupo en el que irán de la mano, o al menos se han comprometido a intentarlo, fuerzas de ultraderecha de Francia (FN), Países Bajos (PVV) y otros países como Bélgica (Vlaams Belang) o Austria (Partido por la Libertad, del fallecido Jörg Haider). Necesita fuerzas de siete países distintos. 

No está nada claro que los eurodiputados de estas tendencias cambien en exceso la operativa del Parlamento Europeo. Hasta ahora, no se han distinguido por desplegar una actividad intensa, más allá de la palabrería. A Farage apenas se le recuerda en la comisión de Pesca, a la que pertenece. Tampoco les gusta mezclarse. Imposible será ver a a UKIP y a la griega Aura Dorada. “La prensa tiende a meterlos en el mismo saco, pero son distintos y les cuesta cerrar acuerdos”, comenta Véron.

 

 
 

Parlamento Europeo

Quién lo forma

En la nueva legislatura tendrá 751 escaños, de los que 54 corresponden a España. La mayoría absoluta está en 376. La entrada de Croacia (2013) ha aumentado temporalmente los escaños a 766.


Qué tareas tiene

Por primera vez, determinará quién presidirá la Comisión Europea. En 80 áreas, del medio ambiente a la protección al consumidor, tiene poder codecisor. Aprueba en qué se gasta el dinero de la Unión. Marca la actividad del Consejo, la Comisión y el BCE. Ante él también rinde cuentas el Alto Representante de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC). Puede crear comisiones de investigación.


Sedes

Bruselas, Estrasburgo y Luxemburgo. Los costes adicionales por este reparto territorial de actividad se estima cada año en 119,9 millones.


Sueldos y dietas

Hoy todos los eurodiputados cobran igual. El sueldo mensual antes de impuestos es de 7.956,87 euros. Tienen una dieta fija de 304 euros. Gasto anual por viajes: hasta 4.243 .

 

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