“Hemos logrado intervenir el precio del suelo” // Asima Shaikh
Entrevista a Asima Shaikh, consejera del distrito londinense de Islington responsable de economía inclusiva y empleo.
Asima Shaikh
Islington es uno de los 33 distritos de la región del Gran Londres, donde los laboristas gobiernan haciendo bandera del desarrollo de una economía inclusiva. Asima Shaikh, consejera responsable de Economía Inclusiva y Empleo, explica las medidas aplicadas a un distrito marcado por las desigualdades. Imán del sector tecnológico y las finanzas, convive con un 40% de pobreza infantil. Shaikh reivindica entre otras su contundente política de vivienda.
¿Cómo afecta la gentrificación a Islington?
La gentrificación ha ido adoptando diferentes formas en cada década. En la modalidad más reciente, se produce un incremento remarcable del precio del suelo, porque la vivienda se considera un activo donde invertir. Los constructores quieren construir pisos caros y reformar los que hay para hacerlos más caros, de modo que los alquileres suben y las comunidades más pobres se ven desplazadas. La gentrificación también afecta a los pequeños negocios. Las grandes corporaciones, la banca y la gente de muchos recursos se pueden permitir pagar precios muy elevados de compra y alquiler pero el resto no.
Usted dice que la autoridad local debe hacer activismo. ¿Qué quiere decir con eso?
Sabemos que en Londres no hay suficientes viviendas asequibles. Nuestra política consiste en que si los promotores quieren pisos de cierto número de unidades, nos tienen que entregar forzosamente un 50% de pisos asequibles. Empezamos en 2012.
¿Con qué resultado?
Le pondré un ejemplo. Un espacio donde estaba la antigua prisión de mujeres de Holloway [cerrada en 2016], que era del Ministerio de Justicia y que todo el mundo quería. Dijimos que queríamos aplicar en él la norma del 50% de vivienda social, además de impulsar un centro de mujeres. Hemos logrado rebajar el precio. Nuestra política ha permitido que el alcalde de Londres [Sadiq Khan] haya prestado dinero a la asociación Peabody para construir viviendas, y habrá un 60% de vivienda social, más de lo requerido inicialmente. Nuestra política reduce radicalmente el precio del suelo. La valoración inicial era de 200 millones de libras y finalmente ha bajado a 80 millones, gracias a la evaluación de viabilidad financiera.
¿En qué consiste esta evaluación?
El sector inmobiliario dirá que estás frenando la actividad económica. Tienes que poder demostrar que el proyecto es viable aunque la mitad se destine a vivienda social. Y su defensa firme se hace mediante una evaluación de viabilidad financiera. La autoridad local tiene que estar segura de que ganará en los tribunales. Los promotores dicen que pagaron mucho dinero por el solar y que no les salen los números. Pero es una broma. Claro que ganan dinero, solo que no ganan tanto como desearían. Es imprescindible que el sector público refuerce sus capacidades para defender sus posiciones, no siempre tiene la preparación y el conocimiento suficientes. El sector privado tiene abogados corporativos muy bien pagados que buscan todas las ranuras legales para ganar.
¿La evaluación dice cuál es el valor del suelo?
Se lo explico con un ejemplo. Un promotor compra un solar del Ministerio de Defensa, ya que el Gobierno conservador se lo vende todo para conseguir recursos por la austeridad. El promotor compra muy caro pese a conocer nuestra política del 50%. Como no cumple el requisito, la comisión de planificación rechaza la autorización de construcción. La pide por segunda vez, y entonces ofrece un 5% de vivienda asequible, manifiesta que no se sale a cuenta reservar un 50% porque pagó muy caro el solar. Nuevo rechazo. Le contestamos: “Sabías que pedíamos el 50%. ¿Por qué pagaste tan caro el suelo?”. Y el promotor recurre la decisión ante la Inspección de Planificación. Esta nos da la razón. El promotor nos lleva a los tribunales y el juez también nos da la razón. Si la ley dice algo, debe respetarse. Es impresionante. Una autoridad local ha podido intervenir el precio del suelo y restringir los precios.
¿Y las constructoras no se van a otra parte?
Un distrito de fuera de Londres no podría pedir el 50% porque el cálculo de viabilidad no se lo permitiría. Podemos aplicar el 50% porque aquí los precios son muy elevados y el promotor gana dinero igualmente. El teniente de alcalde de Londres, James Murray, que procede de Islington, trabaja para que haya un estándar del 35% para todos los distritos de Londres.
¿Piden un 50% asequible para oficinas?
No. Los promotores están obligados a un 10%. Por ahora, con este porcentaje estamos seguros de no perder ningún posible recurso. Nuestra política consiste en ofrecer espacio gratuitamente durante 20 años a una empresa a cambio de que esta lo devuelva con valor social, mediante contratos de trabajo, becas o formación. Sabemos qué vale el alquiler durante un año y sabemos qué cuesta contratar a alguien.
Y monitorizamos el proceso.
¿Cómo afrontan los retos, con un gobierno británico de signo conservador?
Nuestra estrategia consiste en explicar que las iniciativas son de sentido común, que son una buena manera de gestionar. Más que emplear un lenguaje que pueda asustar, se trata de conseguir resultados, de hacerlo mejor.