Trabajadores cada vez más pobres
Precariedad: Casi el 15% de los españoles con empleo no consigue llegar a fin de mes
ILUSTRACIÓN: PERICO PASTOR
No hace mucho tiempo, recién nacido el siglo XXI, a los trabajadores entonces conocidos como mileuristas se les miraba con compasión por tener sobrevivir con tan escaso salario. Apenas una década más tarde, 1.000 euros al mes se considera un salario más que digno que muchos desearían tener. Incluso cobrar el salario mínimo ha dejado de ser algo marginal para convertirse en la norma en algunos sectores de actividad, especialmente en los servicios.
Una de las herencias más dolorosas e inquietantes que nos deja la crisis es el aumento en los países desarrollados de los llamados “trabajadores pobres”, aquellos que no llegan a fin de mes pese a tener un empleo. Oxfam Intermón calcula que el 13,2% de los trabajadores españoles está en esa situación. En su informe Bajan los salarios, crece la desigualdad, la ONG subraya que el caso de las mujeres es aún peor. El porcentaje de trabajadoras pobres en España sólo es superado, en la Unión Europea, por el de Rumanía.
¿Cómo es posible que en pleno siglo XXI tener un trabajo no asegure cubrir las necesidades más básicas? El aumento de la desigualdad salarial derivado de la crisis es en buena parte culpable. Según cifras de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN), la tasa de trabajadores pobres pasó del 11,7% en 2013 al 14,2% en 2014, y al 14,8% en 2015.
Aún es pronto para saber si la incipiente recuperación de la economía ayudará a bajar esos porcentajes, pero experiencias pasadas no invitan al optimismo, pues en España la pobreza suele aumentar a un ritmo vertiginoso en períodos de recesión y apenas desciende en las fases de crecimiento. Los primeros indicadores apuntan que el número de trabajadores pobres no está descendiendo al mismo ritmo que lo hace la creación de empleo.
BAJA CUALIFICACIÓN
La inmensa mayoría de los trabajadores pobres en España son personas con escasa cualificación empleadas en sectores de baja productividad. Quienes se encontraban en una situación más vulnerable dentro del mercado de trabajo antes de que estallara la crisis, especialmente las mujeres y los jóvenes, se han alejado aún más de quienes estaban en mejor situación. En los últimos diez años la renta nacional se ha ido concentrando en los sectores más pudientes, mientras que las clases medias y los trabajadores han visto menguar su parte del pastel.
1.000 euros al mes está considerado un sueldo más que digno
El salario mínimo es insuficiente para sacar adelante una familia
La reforma laboral de 2012, que restó a los sindicatos poder de negociación con las empresas, ha contribuido a la intensificación del fenómeno, como ha hecho el aumento de las tasas de temporalidad y del trabajo a tiempo parcial.
El salario mínimo interprofesional (SMI) es aún insuficiente para sacar adelante a una familia, incluso sólo para sobrevivir en muchas ciudades españolas, donde los precios de la vivienda han comenzado a crecer de nuevo. A pesar de la reciente subida del 8% (la mayor de la historia, de 655,20 a 707,60 euros al mes en 14 pagas), España sigue estando a la cola de la Unión Europea también en este terreno.