Una globalización menor y entre amigos
La pandemia y la guerra de Ucrania están acelerando el retroceso de la mundialización iniciado tras la crisis de 2008. Ambos sucesos podrían traer consigo también una mayor fragmentación de los sistemas productivo y financiero.
Tras una crisis financiera, una pandemia y una guerra en Europa, ¿cómo le va a la globalización económica? Con toda seguridad, no tan bien. ¿Desde qué punto de vista? La globalización es, ante todo, la organización de cadenas de producción a nivel mundial por parte de las multinacionales. Estas deciden dónde se produce qué y en qué condiciones laborales. Desde 2008, esas decisiones son ya menos globales. Aún lo serán menos en el futuro. La globalización es también la circulación del ahorro en busca de inversiones internacionales: los bancos y los inversores financieros deciden quién recibe los capitales (países, empresas, colectividades locales, etc.) y a qué tipo de interés. También en este caso ha comenzado el retroceso. Pero no hasta el punto de provocar una desglobalización total o de suprimir el predominio del dólar en el sistema monetario internacional. La globalización...