De indignados a cooperativistas
De la semilla puesta por MedESS 2013 en Túnez brotan ahora proyectos para reforzar la economía social en ambas orillas del Mediterráneo.
Acto en el encuentro de mayo, en Túnez. FOTOGRAFÍA: MEDESS 2013
Es fácil que la indignación que llevó a la primavera árabe conduzca a la desesperanza: basta con observar lo que ha sucedido en Egipto. Por eso tiene tanto sentido explorar todas las fórmulas a ras de suelo que, a falta de grandes soluciones que emanen de las altas esferas políticas, puedan significar mejoras tangibles en la vida cotidiana de los ciudadanos, tanto desde un punto de vista económico como de calidad democrática: a ello quiso contribuir, con la bandera de la economía social, MedESS 2013, que en mayo se celebró en Túnez con la participación de más de 600 personas y 50 iniciativas empresariales —entre ellas, la cooperativa española Suara—, bajo el impulso y organización de iesMed, cooperativa europea con sede en Barcelona.
El encuentro nada tiene que ver con la clásica feria solidaria, sino que aspira a incorporar dinámicas de negocio (financiación y no donativos; profesionalización y no voluntariado; planes de negocio y no activismo) en el mundo de la economía social, que en ocasiones resulta indistinguible del de las ONG cuando su papel, en teoría, es muy distinto.
“No se trata de donativos, sino de negocio que pueda además ser un acelerador de la historia”, explica Rodérick Egal, presidente de iesMed. “Se trata de huir de la dinámica Norte-Sur y abrir un auténtico espacio mediterráneo en el que la economía social realmente pueda prosperar y ofrecer oportunidades a la gente”, añade Egal, gestor de larga trayectoria en las potencias francesas de la economía social (Crédit Coopératif, MAIF, Atlantis...).
El encuentro de 2013 tendrá continuidad en 2015 con otro gran encuentro de networking de la economía social, pero de la semilla de Túnez han brotado ya otros tres proyectos para avanzar hacia la máxima profesionalización y excelencia en el sector, para ayudarle a prosperar en entornos competitivos y no solo en el de militantes afines: Campus MedESS, que se ha propuesto crear una gran escuela de formación; la red CitESS, un proyecto de polos de competitividad territorial que apoye a emprendedores de la economía social y solidaria y, en tercer lugar, el fondo de inversión CoopMed, dotado inicialmente con hasta 20 millones de euros.
Según los promotores de MedESS, la economía social suma 400.000 empresas y seis millones de empleos en el espacio mediterráneo. Pero con un impacto muy desigual en el Norte y en el Sur: en los países europeos supone entre el 10% y el 25% del empleo, porcentaje que cae a apenas el 1% en el Magreb.
