Impulso cooperativo en Galicia
EspazoCoop se convierte en la mayor asociación de cooperativas de la comunidad autónoma gracias a la fusión de tres entidades.
Mural de Cestola na cachola, cooperativa de EspazoCoop, en Vigo. FOTO: CESTOLA NA CACHOLA
Funcionaban cada una por su lado, pero llevaban tiempo colaborando y al final dedicieron juntarse. Con la celebración de la primera asamblea ordinaria y el voto unánime de los asistentes, en junio pasado concluyó el proceso de creación de la mayor asociación de cooperativas de Galicia. EspazoCoop es fruto de la integración de la Unión de Cooperativas de Trabajo Asociado (UGACOTA), la Unión de Cooperativas de Enseñanza (UCETAG) y la Federación de Cooperativas Sinerxia. “Nos dimos cuenta de que en los consejos rectores nos encontrábamos las mismas personas”, recuerda Celso Gándara, presidente de EspazoCoop, “y los servicios que prestábamos eran prácticamente los mismos”. Hubo un momento en que resultaba más complejo y más caro coordinar y mantener tres entidades que integrarlas en una sola.
Además de crear economías de escala y mejorar la posición de mercado de las cooperativas, la fusión ha permitido ganar peso social y tener más presencia en los medios de comunicación. EspazoCoop, explica su presidente, quiere contribuir a reducir la atomización que caracteriza tradicionalmente al movimiento cooperativo en Galicia y tener un “efecto tractor” en otras empresas y asociaciones. “El mundo empresarial en general tiende a la concentración, y con el cooperativismo ocurre lo mismo”, afirma Gándara.
PROCESO COMPLEJO
En un estudio sobre el proceso de fusión de EspazoCoop, las profesoras Ana Oliveira y María Bastida, de la Universidad de Santiago, ponen de relieve que es la primera vez que en Galicia se crea una asociación “multiclase”, que permite asociarse a cualquier tipo de cooperativa sin importar que esta se defina como de trabajo, servicios o consumo. La integración ha tardado tres años en consumarse, síntoma de que las cosas no han sido precisamente fáciles. Las profesoras Oliveira y Bastida destacan que el cambio en el modelo organizativo ha obligado al personal de las tres asociaciones a salir de la zona de confort para adaptarse a sus nuevas tareas.
El resultado es una unión de cooperativas con una plantilla de nueve trabajadores distribuidos en tres sedes del eje atlántico gallego: A Coruña, Santiago y Vigo. EspazoCoop agrupa a 181 cooperativas, de las cuales 152 son de trabajo, 28 de enseñanza y una de consumo. En total, las empresas cuentan con 1.120 socios trabajadores y 570 personas empleadas. La facturación conjunta asciende a 45 millones de euros.
La integración de empresas transforma el tejido productivo
El trabajo en común ha florecido como resultado de la crisis
Coincidiendo con el nacimiento de EspazoCoop se han cerrado otros procesos de fusión que están transformando el cooperativismo gallego. Dos han tenido lugar en el mundo agrario y otro en el ámbito de los servicios.
El primero es el nacimiento de Clum, cooperativa de segundo grado que engloba a Feiraco, Melisanto y Os Irmandiños y que ya se ha convertido en el mayor grupo lácteo de Galicia, con 3.500 productores. El segundo es Aira Sociedade Cooperativa Gallega, fruto de la unión de Agris, Icos, Cogasar, Coelpan y Leira. La nueva sociedad integrará a más de 2.800 agricultores y ganaderos con una plantilla que supera los 220 empleados repartidos en 15 centros de trabajo. En el ámbito de los servicios, la Cooperativa Farmacéutica Gallega (Cofaga) se ha integrado con Bida Farma, una distribuidora de reciente creación fruto de la unión de ocho cooperativas farmacéuticas.
El movimiento cooperativo gallego ha experimentado un notable crecimiento durante la crisis. Según los datos más recientes de la Xunta, la comunidad autónoma cuenta con 1.318 cooperativas, el 30% más que hace diez años, que dan empleo directo a 10.000 personas.
