Tangente, donde convergen las cooperativas de Madrid
Con 16 empresas y 75 empleos, el grupo cooperativo se ha convertido en una organización de referencia cooperativa de la Comunidad de Madrid.
Miembros de la cooperativa Heliconia, una de las empresas del grupo. FOTO: Mariana Vilnitzky
Hasta ahora nunca se había logrado reunir en Madrid a un grupo de 15 cooperativas que trabajaran en conjunto con una estrategia empresarial unificada. Lo ha logrado Tangente, y es la estructura que ha permitido hacer frente a la crisis y mejorar los servicios que las cooperativas dan a la comunidad.
Las empresas del Grupo Tangente desarrollan actividades de negocio que van desde las tecnologías de la información a la agroecología, la asesoría empresarial y los servicios socioeducativos.
Tienen muchos proyectos en marcha, que son posibles gracias a la intercooperación. Una de las actividades más destacables es el Aula Tangente. Al contar con una diversidad de experiencias y perfiles de las organizaciones que componen la cooperativa pueden darse el lujo de ofrecer una gama amplia de cursos, e incluso conectar temas.
El segundo proyecto relevante que han logrado definir es el que han llamado “Emprender.coop”. Se trata de un conjunto de servicios interconectados destinados a promocionar iniciativas de economía social. Conectan actividades de comunicación y difusión de las empresas con la formación específica —según las necesidades del cliente—, la asesoría empresarial y el acceso a posibles redes tanto de proveedores como de ventas.
Los próximos días 1 y 2 de junio se llevará a cabo en Madrid por primera vez una gran feria de empresas de economía social y solidaria (véase la sección de Agenda) en donde quienes participan podrán mostrar sus productos e intercambiar experiencias. El Grupo Tangente es uno de más implicados en su organización, dentro de la Red de Economía Social y Solidaria (Reas) que cuenta con más de 250 empresas y entidades de economía social distribuidas en todo el territorio español.
El tercer eje de trabajo es el ofrecimiento de una cartera de servicios que se agrupan en torno a la ciudadanía y la sostenibilidad, destinados principalmente a las administraciones públicas. Desde la creación de Tangente las entidades que forman parte de la cooperativa han conseguido mejorar su solvencia y desarrollar servicios y proyectos más innovadores, integrales y multidimensionales, que les permiten tener mayor capacidad a la hora de presentarse en los concursos públicos.
La fortaleza de Tangente, además de la unión empresarial, está en la confianza preexistente entre sus miembros. “Tangente no existiría si antes no se hubieran generado las complicidades creadas bajo el paraguas de La Madeja”, explica Mikel Fernández, encargado de la coordinación empresarial del grupo. La Madeja es una red de cooperativas que antes compartían un espacio de dos pisos en pleno centro de Madrid. El encuentro diario permitió que las personas que concurrían allí pudieran relacionarse.
La colaboración entre cooperativas traspasa el ámbito autonómico. Tangente se ha basado en las experiencias catalanas de intercooperación; por ejemplo, la Xarxa Gedi y el Grupo Ecos, y recibe su apoyo.
El soporte mutuo les ha servido. Con una inversión conjunta de 50.000 euros anuales, han conseguido mantener los empleos y ampliar espacios en un contexto de contracción económica.