He leído, en el nº 70 de Alternativas Económicas, el interesante artículo ‘Los economistas cogidos en flagrante delito de ideología’, de Christian Chavagneux. Presenta un estudio en el que se preguntó a economistas de postín si compartían o no una afirmación para la que, en algunas ocasiones, se indicaba su verdadera autoría y en otras, se atribuía a economistas de tendencias heterodoxas.