Un inusual descenso de los infartados hospitalizados preocupa a los cardiólogos

Los responsables de las unidades de cardiología y hemodinámica de los diez principales hospitales públicos de Catalunya han difundido un inquietante mensaje de alerta, dirigido a la población en general y a los pacientes coronarios en particular, en el que advierten de que desde que se inició el estado de alarma a consecuencia de la pandemia del SARS CoV-2 no están llegando a los centros sanitarios los enfermos con infarto de miocardio o patología coronaria que cabía prever.

Los cardiólogos piden que quien estos días sienta algún malestar que les recuerde anteriores episodios cardiacos, dolor intenso en el pecho o fuerte sensación de ahogo no vinculada con ningún resfriado, llamen al 112. Esa llamada activará el Código Infarto, un circuito de atención urgente que coordina a los hospitales con el servicio de ambulancias y que permite una atención médica hospitalaria lo más inmediata posible de quien está sufriendo un infarto de miocardio.

El miedo a molestar, el convencimiento de que los médicos están desbordados y no pueden atender a nada que no sea el coronavirus, e incluso algunas informaciones recientes que advertían de que el sistema sanitario está centrado, en un 85% de sus capacidades, al covid-19 está teniendo como consecuencia una injustificada ausencia de pacientes coronarios, señalan dichos especialistas, entre los que se encuentran los doctores Fina Mauri y Antoni Bayés, del Hospital Germans Trias i Pujo; Marta Sitges y Manel Sabaté, del Clínic; Josep Comín y Joan Antoni Gómez, de Bellvitge e Ignacio Ferreira y Bruno García, del Vall d’Hebron, todos ellos de Barcelona. Los especialistas de los hospitales de Sant Pau y el Mar, también de Barcelona, y Josep Trueta, Arnau de Vilanova y Joan XXIII del resto de Catalunya suscriben la alerta. Muy posiblemente, ocurre lo mismo en los del resto de España.

Los cardiólogos advierten asi mismo de que los escasos pacientes coronarios que están acudiendo al hospital estos días sufren procesos avanzados, con complicaciones más difíciles de remontar que las de quienes han solicitado ayuda médica ante los primeros signos de malestar cardiaco. “Habíamos conseguido reducir algunas de las complicaciones más graves de las patologías cardiacas —indican—, como son la muerte súbita, la rotura cardiaca o el infarto de miocardio que deja al corazón prácticamente sin fuerzas para latir”. 

Temen estos médicos que, tras la epidemia del covid-19, se descubra una inadvertida proporción de enfermos cardiacos que han empeorado gravemente en sus procesos, o que directamente hayan fallecido por esta causa. Piden, en conclusión, que quien reúna las características citadas llame a su hospital o al 112. “Les estamos esperando”, reiteran, ya que las unidades coronarias y de hemodinámica no han sido suprimidas ni reducidas a consecuencia de la pandemia. Como tampoco lo han sido las oncológicas. Una de las firmantes, la doctora Fina Mauri, subraya que los cardiólogos están revisando estos días todas las fichas clínicas de los pacientes y pide a los enfermos que si reciben una llamada instándoles a ir al hospital "deben acudir inmediatamente".

Para finalizar, los especialistas en cardiología y hemodinámica recuerdan que las personas con hipertensión, diabetes y colesterol elevado, en especial si ya han sido diagnosticadas de alguna patología cardiaca o coronaria, deben mantener estos días un estricto control de sus parámetros habituales, así como seguir en lo posible el ritmo de vida, dieta y ejercicio que les fueron pautados.

Ante la situación excepcional que vivimos, hemos decidido dejar abierto para todo el mundo este número de Alternativas Económicas. Puedes descargarte la revista aquí: