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May se aferra al poder

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Julio 2017 / 49

DESCONCIERTO A Theresa May le salió el tiro por la culata. Los votantes británicos frenaron en seco el intento de la líder conservadora por obtener en las urnas un mandato claro para negociar un Brexit duro con la Unión Europea. A pesar de que los tories fueron el partido más votado en las elecciones del 8 de junio, la primera ministra perdió la mayoría absoluta y ha tenido que recurrir a un pacto con los unionistas de Irlanda del Norte para conseguir la mayoría parlamentaria que le permita seguir gobernando. La cuestión es durante cuánto tiempo. 

May sale tremendamente debilitada de los comicios. En lugar de negociar el divorcio con Bruselas en una posición de fuerza, tendrá que hacerlo con buena parte de los ciudadanos en contra y con la amenaza de que un sector de su propio partido le dé la espalda en cualquier momento. 

Los resultados de las elecciones muestran que los británicos afrontan la separación de la UE profundamente divididos. Va a ser muy difícil que la primera ministra se salga con la suya, pues la mayoría de los miembros de la Cámara de los Comunes son partidarios de un Brexit  suave y los sondeos de opinión efectuados tras las elecciones muestran que el apoyo popular al Brexit duro es cada vez menor. 

La sorpresa electoral fue el excelente resultado de los laboristas y de su líder, Jeremy Corbyn, que ha recuperado buena parte de los votantes perdidos por el partido y que goza de una enorme popularidad entre los jóvenes. El veterano líder, sin embargo, tendrá que esperar a una nueva oportunidad.

Las elecciones también han supuesto un frenazo para las aspiraciones de independencia de los nacionalistas escoceses. La ministra principal, Nicola Sturgeon, anunció que aplaza la idea de un segundo referéndum para centrar sus esfuerzos en forzar un Brexit blando que mantenga a Escocia dentro del mercado único europeo.

 

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