
El nivel de construcción de vivienda protegida (VPO) es tan bajo que cualquier dato positivo hay que celebrarlo. Según los datos del Ministerio de Vivienda, sumando los planes autonómicos y los estatales, a lo largo de 2024 en España se otorgaron 14.371 calificaciones definitivas de VPO, lo que significa que son viviendas ya terminadas (a veces se utiliza el dato de las calificaciones provisionales y se presta a confusión). La cifra supone un incremento del 62,4% respecto del nivel alcanzado el año anterior. Es el avance más importante desde el cataclismo inmobiliario de 2008. En la década de 1990, se superaban anualmente las 70.000 unidades e incluso en 1997, se alcanzaron las 85.000. Así, pues, el panorama no cambia. Además, dos terceras partes de ellas están destinadas a la compra y no al alquiler, donde es más difícil el acceso al mercado inmobiliario. Las viviendas de protección oficial son más económicas que el resto, y acceder a ellas requiere cumplir...