Se dice que la Economía es la ciencia de la escasez, ya que trata la producción y el intercambio de bienes y servicios para satisfacer las necesidades utilizando para ello recursos limitados. Esta tradicional definición puede crear confusión, puesto que da a entender que su objetivo principal es combatir la escasez de renta, es decir, luchar contra la pobreza. Sin embargo, no hay que saber mucho de economía para percibir que no todos los esfuerzos de economistas, políticos, organismos internacionales o agentes económicos van dirigidos a acabar con la pobreza.
El discurso económico ortodoxo más bien recomienda inundar la parte alta de la estructura económica confiando en que, por efecto gravitatorio, acaben llegando algunas gotas a los pisos más bajos de dicha estructura. Es evidente que el crecimiento y el desarrollo económicos a lo largo de los siglos han permitido un aumento enorme de la riqueza y una indudable mejora de las condiciones de muchas personas. Sin embargo, parece también evidente que mientras unos hacen largos en su piscina del ático otros, a duras penas, tienen agua para lavarse la cara.
¿No hay una...
