Un rey conservador, centralista y polarizador
Encuesta de 40dB para la Plataforma de medios independientes.
Los españoles ubican a Felipe VI en la derecha del espectro político. En concreto, el conjunto de ciudadanos colocan al rey prácticamente en el mismo punto en el que se ubican a sí mismos los votantes del PP y ligeramente más hacia el centro de donde se autocolocan los de Vox. Los electores de Ciudadanos lo ven ligeramente a su derecha, los del PSOE, lejos a su derecha, y los de UP lo sitúan en la derecha extrema. Esta es una de las observaciones que se pueden extraer de los datos del sondeo sobre la monarquía que 40dB ha elaborado para la Plataforma de medios independientes.
En el eje centralismo/descentralización vuelve a suceder lo mismo. El conjunto de los españoles ven al monarca en el punto en que se autocolocan los votantes del PP (y de C’s también en este caso) y algo más centrado que el punto en que se sitúa a si mismo el electorado de Vox. Los electores del PSOE no lo ven tan lejos de sí mismos en este apartado, mientras que los de UP, que se sitúan a sí mismos como muy descentralizadores, consideran a Felipe VI un centralista sin paliativos.
Al rey emérito lo ve el conjunto de los españoles algo más a la derecha y más centralista que a su hijo, mientras que sitúan a la reina Leticia más centrada en ambos ejes.
Una tercera característica de Felipe VI que se extrae del sondeo es que, queriéndolo o no, aparece como un monarca polarizador. Las actuaciones de Juan Carlos I las aplaude o rechaza el conjunto de la sociedad de manera bastante uniforme. Con mayor o menor énfasis en función de la ideología pero con escasa polarización. Su actuación durante el 23-F y su decisión de renunciar al trono son aplaudidas, mientras que su salida hacia los Emiratos Árabes Unidos tras verse implicado en un caso de presunta corrupción es rechazada con contundencia.
Las actuaciones de Felipe VI, sin embargo, son apoyadas o rechazadas en bloque en función de la posición ideológica en la que se sitúa el ciudadano. Tanto da que sea su severa intervención a los dos días de la consulta sobre la independencia de Catalunya, como su papel en la crisis del coronavirus o su reacción ante los negocios de su padre, las valoraciones son en bloque: los votantes de las derechas le ponen buena nota a todo, los del PSOE le ponen siempre un aprobado raspado y los de Unidas Podemos le suspenden una y otra vez. Todo suscita la misma reacción.
La comparación entre padre e hijo puede hacerse al cotejar las valoraciones de los ciudadanos sobre siete cualidades que los propios encuestados consideran importantes. La que más diferencia a uno del otro es la honradez. Juan Carlos I suspende con un 3,1 mientras que Felipe VI aprueba holgadamente con un 6,6. El rey emérito también suspende (3,8) ante este enunciado: “entiende a la gente como yo”. En empatía con los ciudadanos, el hijo saca su nota más baja (5,5).
Felipe VI aprueba en todas las valoraciones, aunque no pasa del 6 en otras dos cualidades significativas: la neutralidad y la capacidad de mediar entre diferentes fuerzas políticas. Obtiene notable en su capacidad para “promocionar la imagen de España en el exterior” y en “defender la integridad territorial de España”. Su mejor nota, cómo no, responde a este enunciado: “Está bien formado y preparado”. Juan Carlos I obtiene la mejor nota en la defensa de la integridad territorial.
En otra pregunta sobre valoración en general de cada uno de los miembros de la Casa Real, la diferente opinión de los ciudadanos sobre padre e hijo queda también clara: un 3,3 para el primero y un 5,8 para el segundo. La reina emérita Sofía es la mejor valorada, con un 5,9, mientras que la reina Letizia suspende con un 4,7. Es significativo que los electorados del PP y de Vox aprueben a los cuatro, incluido el rey emérito, mientras que los votantes de Unidas Podemos los suspenden a todos.
El sondeo se aventura también en un tema muy delicado: ¿Conocía Felipe VI que su padre cobraba “comisiones de Arabia Saudí y ocultaba el dinero en paraísos fiscales” antes de que los hechos se hicieran públicos? Los que piensan que sí son algo más del doble que los que opinan que no (48% frente a 23%). Sin embargo, al preguntar a continuación si el rey “se benefició de las supuestas comisiones ilegales recibidas por su padre”, son más los que piensan que no (41%) que los que opinan que sí (32%).
Abdicación de Juan Carlos I, severa intervención de Felipe VI tras el referénudum de Catalunya, escándalo de las supuestas comisiones saudíes al rey emérito y cuentas en paraísos fiscales, y finalmente salida de España para instalarse en los Emiratos Árabes. La monarquía española está viviendo años convulsos. ¿Qué futuro le espera? Puede dar alguna pista la valoración de esta frase: “La infanta Elena no reinará en el futuro”. Está en desacuerdo con esta aseveración el 27% de los encuestados y muestran su acuerdo el 32,6%, pero la que gana con el 39,7% es esta otra respuesta: “No lo sé”.
La Encuesta sobre la Monarquía es una iniciativa impulsada por la Plataforma de Medios Independientes (PMI), a la que se han sumado 16 cabeceras, entre ellas Alternativas Económicas, con el fin de hacer posible este sondeo, el mayor que se ha realizado nunca en España sobre la monarquía. Para poder efectuarlo, la PMI organizó una recaudación de fondos que logró completar en un solo día. La encuesta, financiada por 1.965 donantes, se encargó a 40dB, el instituto de opinión dirigido por Belén Barreiro, expresidenta del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas). El proyecto surgió tras la solicitud de estos medios al CIS de una encuesta sobre la monarquía, un asunto sobre el que el organismo lleva más de cinco años sin preguntar.
Se han efectuado 3.000 entrevistas online a ciudadanos de 16 años o más entre el 21 de septiembre y el 5 de octubre. La muestra se ha ponderado por sexo, edad, comunidad autónoma, tamaño de hábitat, clase social y recuerdo de voto. El error muestral es de +/-1,79% (95% de confianza).
Más información del sondeo: