¿Merece la pena albergar los JJ. OO.?
Los macroeventos deportivos prometen grandes transformaciones y beneficios para los países que los acogen, pero las expectativas raramente se cumplen y, a menudo, dejan abultadas facturas, económicas y sociales
JJ. OO., ¿quién paga la fiesta?
Los Juegos Olímpicos suelen costar más de lo previsto y dar menos de lo prometido. Los de París en 2024 no parece que vayan a escapar a la 'maldición del ganador'
Un laboratorio con poca ambición
A pesar de innovaciones y esfuerzos para reducir los impactos, los Juegos parisinos aún castigarán al medio ambiente
Un empujón en una carrera de fondo
Los Juegos ayudarán a transformar la región con el porcentaje de pobreza más alto de la Francia metropolitana, pero los retos seguirán siendo descomunales
Londres: gentrificación olímpica
El macroevento revitalizó el este de la capital para la población con alto poder adquisitivo y agravó la crisis de vivienda para las clases populares
La excepción de Barcelona 92
El impacto económico y social beneficioso de los Juegos de 1992 fue singular, irrepetible y, probablemente, exagerado