La protesta y la queja en la democracia
Un valioso análisis del aumento de las movilizaciones ciudadanas en el mundo
La protesta y la queja forman parte fundamental de las democracias. Una primera constatación es que cada vez hay más reivindicaciones por los abusos de los poderes económicos o la desatención de los gobiernos. Este tipo de manifestaciones son cada vez más necesarias para hacer reaccionar a las autoridades y solventar las deficiencias de los sistemas democráticos. Mucho más difícil y complejo, sin embargo, es definir y comprender la queja.
Joan Vergés Gifra, profesor de Filosofía Moral de la Universidad de Girona, ha escrito una valiosa y útil reflexión sobre las consecuencias de ambas formas de expresión ciudadana. Así, apunta el notable crecimiento de las protestas en nuestro país y en el ámbito internacional. Según el Ministerio del Interior, en 1994 se notificaron en España 10.902 manifestaciones, y en 2018 el número aumentó hasta las 53.726. Tomando como referencia los datos del libro World Protests: A Study of Key Protest Issues in the 21st Century, el autor analiza el aumento de las protestas en el mundo.
El libro incluye algunas acciones tan significativas como la Primavera Árabe, el 15M, el #MeToo, el...