Más mujeres con salario mínimo
El aumento del SMI en 80 euros mensuales afecta más a las trabajadoras. La proporción de perceptoras del sueldo más bajo se ha duplicado desde la crisis de 2008.
Después de la campaña navideña suele aumentar el paro. Enero de este año no fue una excepción, pues terminó con 70.744 personas más en situación de desempleo en comparación con la cifra de diciembre. Los datos empeoraron especialmente en el sector servicios, con un golpe acusado en mayor medida por las mujeres: fueron 49.937 paradas más que el mes anterior, frente a 20.807 hombres más. Las actividades mayormente afectadas están feminizadas, y en ellas campan los contratos a tiempo parcial involuntarios y los bajos salarios. De ahí que las mujeres se vean especialmente beneficiadas por las subidas del salario mínimo interprofesional (SMI), el suelo legal mínimo que puede pagar una empresa a su plantilla.
El SMI para un trabajo a tiempo completo, que al inicio de la crisis de 2008 era de 624 euros mensuales (8.736 al año), ha superado ligeramente el mileurismo, con 1.080 euros (15.120 al año) por decisión del Gobierno, de acuerdo con los sindicatos CC OO y UGT y con la patronal CEOE en contra. Esta pedía el 4% (la mitad) de la subida y no se presentó.
Subida "muy insuficiente"
La última subida, de 80 euros, ha sido considerada "muy insuficiente" por la CGT, al no compensar la pérdida de poder adquisitivo causada por la inflación, pues no alcanza "ni siquiera" la inflación promedio de 2022, del 8,4%. La media de subida salarial en los convenios es, aproximadamente, del 2,8%.
"La medida puede ayudar a disminuir la brecha salarial en España y también beneficia a las personas más jóvenes", considera Carolina Martínez Moreno, catedrática de Derecho del Trabajo en la Universidad de Oviedo. "Nada asegura que una subida de 80 euros mensuales sea lo que determine que no se genere empleo".
La Comisión Asesora para el Análisis del SMI considera que las subidas (especialmente la mayor, del 22%, en 2019) "han tenido un impacto marginal sobre el crecimiento del empleo, minorando, en el peor de los casos, de forma muy poco intensa su aumento, al tiempo que han contribuido a reducir la pobreza y la desigualdad".
"Las grandes empresas suelen pagar salarios muy superiores. A la gran masa de microempresas sin trabajadores no les afecta. Quienes sí pueden notarlo más en sus números son las pymes tipo de multiservicios y el sector de la agricultura, pero debemos preguntarnos si es moralmente aceptable y socialmente sostenible, e incluso razonable para el funcionamiento del sistema económico, pagar salarios que impiden a muchos hogares afrontar los gastos básicos", opina Carolina Martínez Moreno.
Según la última Encuesta de Estructura Salarial del INE,publicada en 2022 con datos de 2020, el 27,5% de las mujeres percibió un salario menor o igual al salario mínimo. La proporción era del 14,12% en 2008. Con la subida del SMI, cada vez hay más personas que perciben el sueldo más bajo. Sucede lo mismo con los hombres, aunque en niveles relativos muy inferiores. La propoción ha dado un salto del 4,76% al 11,9%.
Según CC OO, la incidencia de la última subida del SMI es del 18,2% en el caso de las mujeres, ocho puntos porcentuales más que en el de los hombres, con un total de 2,27 millones de personas beneficiarias. UGT subraya que 6 de cada 10 son mujeres, más en la hostelería y en el empleo del hogar.