El buen patrón, con paradoja
La última película de León de Aranoa satiriza la figura del gran empresario-benefactor, que el cineasta demuestra conocer bien.
Que una película aspire nada menos que a 20 premios Goya, incluidos 8 en las categorías de interpretación, es ya en sí mismo todo un acontecimiento, verdaderamente insólito que demuestra hasta qué punto los colegas de profesión de Fernando León de Aranoa valoran su última película, El buen patrón.
Eso sí: el filme, magnífico, difícilmente tendría tanto éxito en el mundo de la economía oficial: se trata de una sátira, divertida y muy bien estructurada, con interpretaciones soberbias (empezando, claro, por la del propio...