Cumplir el pacto constitucional de solidaridad
Mientras haya enormes diferencias de recursos por habitante entre comunidades autónomas, será difícil creer en la igualdad real entre españoles
Los países con varios niveles de gobierno funcionan con pactos diversos sobre el reparto de las funciones y los recursos y los objetivos de nivelación entre los territorios para financiar la prestación de servicios públicos. En el caso español, lo esencial de dichos pactos está en la Constitución de 1978, que en su artículo 138 establece un doble compromiso: el Estado garantiza la realización efectiva del principio de solidaridad entre las nacionalidades y regiones consagrado en el artículo 2 y se compromete a impedir privilegios económicos y sociales entre comunidades autónomas.
En mi opinión, buena parte de las permanentes tensiones en torno a los sistemas de financiación autonómica se derivan de que ambos compromisos se incumplen. El fundamento de esta valoración es que las diferencias entre comunidades son demasiado grandes para que pueda haber nivelación de recursos, cualquiera que sea el criterio razonable con el que se midan las necesidades: población o población ajustada por factores sociodemográficos y de coste. Las diferencias de recursos por habitante entre comunidades autónomas forales y comunes...