Allende, el sacrificio que marcó a los antifranquistas
Para los españoles que luchaban contra la dictadura franquista el golpe de estado contra el gobierno democrático de Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973, del que se cumplen 50 años, dejó una huella imborrable. Es verdad que en la oscuridad de la noche franquista, antes del golpe de Pinochet, los debates en la izquierda española sobre Chile se perdían entre los partidarios de la lucha armada y quienes veían con simpatía la experiencia chilena. El golpe y toda la sangre que derramó en el Estadio Nacional, con 40.000 víctimas y más de 3.000 muertos o desaparecidos, cambió radicalmente las cosas. El golpe fue una ducha de realismo que marcó a los antifranquistas. El apoyo a los exiliados chilenos se convirtió en una prioridad que aproximó muchas posiciones. De alguna manera el aplastamiento de la democracia chilena y el heroísmo de su presidente, que prefirió quitarse la vida a la rendición, facilitó el acercamiento de las fuerzas políticas que luchaban por instaurar una sociedad democrática.
Lo relevante de la experiencia de la Unidad Popular de Salvador Allende es que había llegado al poder tras vencer...