La irresponsabilidad de creer en Facebook
La contribución de Facebook a la victoria electoral de Donald Trump en 2016 está bien documentada
En 2009, cuando Facebook tenía solo unos 400 millones de usuarios, Sarah Wynn-Williams, una joven diplomática neozelandesa, experimentó lo que ella misma califica como "una epifanía": una creencia inquebrantable en que esa plataforma iba a cambiar el mundo.
Su expectativa —que califica ahora como "ingenua"— era que Facebook podría llegar a ser "una fuerza política mundial que cambiaría Internet y el mundo", y que para ello necesitaría un diplomático. Así que no paró hasta conseguir que dos años más tarde la contrataran como directora de Políticas Públicas Internacionales. Los irresponsables es un relato del desencanto progresivo de su autora al constatar —hasta ser despedida por "bajo rendimiento" en 2017— que los objetivos reales de la empresa se orientaban más a llegar a ser una fuerza comercial global que a "hacer un mundo más abierto y conectado", como Facebook proclamaba al salir a Bolsa en 2012.
Doble moral
Una de las constantes del libro es la descripción descarnada y crítica de la personalidad y el estilo autocrático de Mark Zuckerberg (CEO y fundador de Facebook), así como de la cultura...