Som Energia, un instrumento para la innovación social

La cooperativa Som Energia no sólo se ha convertido en una empresa gestionada con transparencia que comercializa y produce energía. También actúa como movimiento social organizado contra un modelo energético caro, irracional, ineficiente y desfasado.

Por Dolors Clavell Nadal

“Hay que repensar la economía” // Jason Nardi

Jason Nardi (44 años) es un activista por los derechos sociales nacido en Italia, hijo de madre estadounidense y padre italiano. Graduado en Princeton University, en Estados Unidos, y en Ciencias políticas, en la Universidad de Florencia, está titulado  también en Comunicación y Medios.

Por Mariana Vilnitzky

“Nuestro objetivo es cambiar el mercado energético” // Gijsbert Huijink

Master en Economía Cuantitativa, el holandés Gijsbert Huijink ha centrado su ca-rrera en proyectos de innovación y nuevas tecnologías, además de responsabilidad social en el mundo empresarial. Vivió 12 años en Rumanía, pero hoy reside en Girona (Catalunya), en una casa rural donde, por supuesto, toda la energía sale de fuentes renovables.

Por Mariana Vilnitzky

9. Energía

Saltarse al oligopolio energético no es fácil, pero existen muchas posibilidades mediante un creciente abanico de empresas y cooperativas que aportan exclusivamente energía verde. El cambio no encarece la factura, pero exige una toma de conciencia previa y una voluntad de contribuir a variar la situación, lo cual ayuda a explicar el auge de algunas iniciativas que convierten al consumidor en socio de la empresa. En cambio, el autoconsumo se ve ahora muy perjudicado por los nuevos peajes.

Por Alternativas económicas

Cómo crear alternativas económicas de base

La crisis y el 15M han impulsado nuevas prácticas económicas, experiencias de consumo colaborativo, iniciativas poscapitalistas innovadoras, con una base común: la participación.

Por Álvaro Porro

Eléctricas sobrerretribuidas

Déficit de tarifa. La factura de la luz no hace más que subir, pero ni aun así las compañías suministradoras cubren costes. ¿Y si no fuera así?

Por Ariadna Trillas