EE UU: renace el movimiento sindical
Tras décadas de retrocesos, los trabajadores están ganando batallas importantes para mejorar su nivel de vida y sus condiciones laborales. ¿Durará la racha?
Corría el 3 de agosto del año 1981 cuando los controladores aéreos de EE UU fueron a la huelga en demanda de mejores salarios y una reducción de jornada. Quienes desobedecieron la orden presidencial de volver al trabajo lo pagaron caro. A pesar de haber presidido durante años el sindicato de actores de Hollywood, Ronald Reagan decidió despedirlos sin contemplaciones, 11.359 en total.
El desenlace de la huelga marcó un antes y un después en la historia del movimiento sindical estadounidense, que había vivido una época dorada en las tres décadas posteriores a la Segunda Guerra Mundial. A partir de aquella fecha, los sindicatos comenzaron a perder afiliados, capacidad de negociación e influencia política, mientras que las cúpulas empresariales se acostumbraban a una menor conflictividad laboral. Las huelgas se hicieron menos frecuentes, en buena parte por la entrada en vigor de una serie de leyes federales y estatales dirigidas a restringir la capacidad organizativa de los sindicatos y reforzar la posición de las empresas en la negociación colectiva.
Algo está cambiando. Obreros industriales, repartidores de...