Una adicción como cualquier otra
El enganche a las tecnologías, al que la juventud es muy vulnerable, también tiene que ver con la salud digital
Los padres haciendo campaña para que se prohíba el móvil en la escuela y el aluvión de familias angustiadas porque no saben cómo lidiar con la exposición de sus hijos a las redes sociales tienen una buena y una mala noticia. La buena es que si tienen las necesidades afectivas fortalecidas y un estilo de vida saludable, con amigos y familia que les protegen, buenos hábitos de deporte y alimentación, lo más probable es que ni Internet ni las redes sociales les provoquen un problema de salud mental.
Enrique Echeburúa, catedrático en Psicología Clínica de la Universidad del País Vasco, quiere quitar un poco de hierro al asunto, que ha provocado cierto alarmismo en los medios. En la conferencia Adicción a las redes sociales en jóvenes y adolescentes, expuso que la mayor parte de la gente usa Internet de manera apropiada. Y solo, entre un 5% y un 10%, de un modo inapropiado. Aunque sí reconoce que hay un mayor riesgo en jóvenes y adolescentes. En esta edad “es cuando comienzan a establecer unas redes de socialización, es cuando son más impulsivos y su cerebro no ha madurado por completo".
Para Echeburúa, “las...