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Urgente: proteger la central de Zaporiyia

Las centrales nucleares no pueden devenir objetivos militares. El actual vacío legal hace necesario un acuerdo global de no agresión a todo tipo de instalaciones atómicas

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Reactores central

En el pasado ya se llevaron a cabo operaciones militares sobre instalaciones nucleares como la del reactor nuclear de investigación iraquí Osirak (clase Osiris francés), destruido en 1981 por F-16 israelíes, así como la de los dos reactores en construcción de la central nuclear iraní de Bushehr (Siemens-KWU), bombardeados en 1987 por cazas iraquíes durante la guerra Iraq-Irán. Posteriormente, acciones militares en 1991 durante la guerra de Eslovenia en el emplazamiento de la central nuclear de Krško (Westinghouse) propiciaron evaluaciones técnicas que podían haber servido para generar directrices de seguridad preparación de emergencias bajo escenarios bélicos, pero que no se tradujeron en desarrollos de guías o estándares del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), sin mandato para contextos de guerra. En la guerra de Ucrania, las primeras acciones bélicas afectaron la zona de exclusión de la central nuclear accidentada de Chernóbil y los centros de investigación nuclear KINR en Kiev y NSC-KIPT en Járkov. La central nuclear de Zaporiyia ha sido campo de batalla, ha sufrido explosiones y sigue...

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