La segunda vida del tren
Un ‘boom’ de nuevos proyectos en toda Europa rescata el ferrocarril y lo sitúa como el eje de la nueva movilidad frente a la emergencia climática
El cierre, en 2009, de la mítica línea ferroviaria Orient Express, que desde 1883 cruzaba Europa de punta a punta, de París a Estambul, parecía destinado a convertirse en uno de esos acontecimientos tan del agrado de los historiadores para marcar cambios de etapa: uno de los grandes símbolos de la revolución industrial del siglo XIX perecía finalmente, tras una larga decadencia —en los últimos años, la ruta ya se limitaba a unir Estrasburgo con Viena— frente al inexorable avance de la modernidad, que en los albores del siglo XXI...