El nuevo Gobierno arranca en un entorno económico algo más favorable que el del año pasado. Especialmente positivas son las señales de reactivación en la eurozona y los últimos datos de creación de empleo.
Hacía 10 años que el paro no bajaba del 14%. Pero nunca, en los últimos siete, lo había hecho en tan baja proporción, según la EPA del tercer trimestre. Es la guinda de la desaceleración.
Casi la mitad de los jóvenes españoles de entre 16 y 30 años no tiene trabajo ni lo busca. La buena noticia es que la mayoría de ellos está mejorando su formación.
El empleo aumenta y el paro recula, pero cada vez con menos fuerza y bajo el persistente signo de la precariedad, en un contexto mundial en el que soplan vientos de crisis. Un dato positivo: crece la población activa.