Desde instancias oficiales se insiste en el inicio de la recuperación. Algunos datos aislados así lo indicarían, comenzando por el producto interior bruto (PIB). En el primer trimestre, aquel creció por primera vez en tres años (...)
La caída de los salarios es superior a la que muestra la estadística, porque debemos tener en cuenta que, tras la destrucción de trabajos temporales ocupados por jóvenes, el empleo que queda es el más cualificado y mejor pagado.
El informe de los expertos sobre la reforma fiscal sigue una clara filosofía: reducir los impuestos al capital y al ahorro y cargar buena parte de la subida de la recaudación sobre trabajadores y rentas medias y bajas.