La investigación de una ONG neerlandesa muestra cómo el laboratorio que fabrica una de las vacunas contra el coronavirus se ha enriquecido a expensas de los gobiernos y practicando una evasión fiscal masiva.
El Gobierno de Pekín apuesta por una economía basada en el consumo interno, más igualitaria y menos dependiente de la deuda, con un mayor control del Partido Comunista.