El sueño roto de dar el mejor servicio
Las personas que trabajan en la sanidad pública a cargo de la gestión privada se sienten impotentes
Las personas que trabajan en la sanidad pública a cargo de la gestión privada se sienten impotentes
La comunidad andaluza es una de las que menos cuesta al estado y no ha seguido el modelo privatizador imperante
Desde 1981 la comunidad autónoma cuenta con un modelo público-privado, pero con la ‘ley Ómnibus’ se ha privatizado aún más
La gestión privada de la asistencia sanitaria pública se extiende por España a cargo de las mismas empresas que arrancaron el modelo en la comunidad valenciana hace 16 años.
Análisis: Se ha dado a entender que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. es unA idea que ayuda a privatizar
El Estado ahorra en gasto farmacéutico gracias a los genéricos. Otra parte del ahorro lo pagan los pacientes
Tanto los recortes como la gestión de los servicios sanitarios en España apuntan a una privatización cada vez más acusada, sin ningún indicio de que ello aumente la eficiencia
España vive una época de recortes Y privatización con poca transparencia. El nuevo modelo, que elimina la universalidad de la atención en salud, no ha demostrado ser mejor.
Tanto los recortes como la gestión de los servicios sanitarios en España apuntan a una privatización cada vez más acusada, sin ningún indicio de que ello aumente la eficiencia
El Estado ahorra en gasto farmacéutico gracias a los genéricos. Otra parte del ahorro lo pagan los pacientes
La gestión privada de la asistencia sanitaria pública se extiende por España a cargo de las mismas empresas que arrancaron el modelo en la comunidad valenciana hace 16 años.
Desde 1981 la comunidad autónoma cuenta con un modelo público-privado, pero con la ‘ley Ómnibus’ se ha privatizado aún más
La comunidad andaluza es una de las que menos cuesta al estado y no ha seguido el modelo privatizador imperante
Las personas que trabajan en la sanidad pública a cargo de la gestión privada se sienten impotentes
David Stuckler y Sanjay Basu, economista y epidemiólogo, denuncian en un libro el coste humano de las políticas de recorte.
La exclusión de inmigrantes en situación irregular del sistema público de salud es injusta, irrelevante en términos DE ahorro y médicamente irresponsable
Como en muchos otros ámbitos, la reforma sanitaria aprobada por el Gobierno del PP ha tomado como excusa la crisis económica y la necesidad de aplicar recortes para colar un peligroso cambio de modelo. Se ha discutido mucho, y con razón, sobre los graves (...)
La ‘Obamacare’, o ‘Affordable Care Act’, promete terminar con un sistema que todavÍa deja fuera a unos 40 millones de personas. El país estará obligado a pagar un seguro privado
El sistema sanitario cubano es libre y gratuito. Es uno de los más eficientes del mundo pobre, y está haciendo del sector médico un servicio de exportación y cooperación
Análisis: Se ha dado a entender que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. es unA idea que ayuda a privatizar
Un recorrido por las películas y series que mejor han retratado la industria periodística, la profesión y las luchas de ahora que ya no somos capitanes
La crisis no ha inspirado demasiadas ficciones aquí, pero sí algunos retratos muy precisos
En la mayoría de películas, incluso en medio de la crisis más grave, ellas acostumbran a aparecer como el sostén de la familia
La crisis de Estados Unidos de los años treinta alcanzó rápidamente a los países europeos y a Japón
La música tiene una gran fuerza evocadora y ha desempeñado un papel central en el retrato de las crisis
La historia se ha nutrido de revueltas y revoluciones, cuya raíz procede de “volver”: los mineros del siglo XIX protestando ahora tras la limusina
La realidad supera a la ficción cuando de lo que se trata es simplemente de ganar dinero. Nada importa. Nadie importa.
Scarlett O’Hara, alzando el puño a un cielo rojizo, es una imagen icónica de cómo rehacerse ante la adversidad.
En un siglo el trabajo ha pasado de mitificación a convertirse en un bien escaso y raro
El crimen organizado puede corromperlo casi todo: está integrado en las estructuras económica y de poder
La Gran Depresión de los años treinta en Estados Unidos produjo migraciones masivas y millones de desplazados en busca de empleo
El cine permitía que la miseria diaria se olvidara en brazos de las estrellas del momento y ayudaba a la liberación de la mujer, pero difundía la noción de mujer-objeto.
El cine nació de la mano de la ciencia. Gracias a él pensaban poder descomponer el movimiento, saber por fin si cuando un caballo galopa, una de las patas sigue tocando al suelo, o podrían también analizar el aleteo de una paloma y seguir el despliegue de los músculos humanos. Los hermanos Lumière pensaban haber inventado algo sin futuro pero con un presente obvio: servir para hacer viajar a quienes no podían pagarse ni un billete de tranvía. El cine enseguida nos hizo conocer mundo, y otros mundos, pues a Méliès le faltó tiempo para enviarnos del Moulin Rouge y la Sorbonne hasta la Luna.
Hollywood fue bautizada como “fábrica de sueños” y el cine, durante los años veinte, treinta, cuarenta y bien entrados los cincuenta del siglo XX fue la gran diversión popular en todo el mundo. Cada país tenía sus mitos, sus rostros populares y sus referencias culturales, pero algunos colonizaban las plateas de medio mundo mientras que otros permanecían dentro de las fronteras nacionales. La miseria diaria podía ser olvidada entre los brazos de Rodolfo Valentino o Hedy Lamarr, la falta de futuro no aparecía como tal si uno se proyectaba entre los decorados de una comedia sofisticada o el espectador se embarcaba vicariamente en las mismas aventuras que Errol Flynn. Los indios perdían siempre, pero para los blancos existía una nueva frontera, una posibilidad de poder empezar de nuevo.
Charles Chaplin en Tiempos modernos.
Pero esa función de entertainment, aun siendo la principal, no ha sido la única ni siempre ha estado reñida con otras. El cine ayudaba a la liberación de la mujer al tiempo que contribuía a difundir la noción de mujer-objeto, se ofrecía como vehículo de conocimiento a la vez que como chicle para los ojos, se hacía eco de las injusticias sociales sin dejar de glosar el tener como principal objetivo vital el casarse con un millonario. La denuncia del fordismo, de la conversión del hombre en máquina que Charles Chaplin hace en Modern Times (1936) coexiste con los trajes de noche de Jean Harlow o Greta Garbo; las huelgas, con las burbujas de champán.
El cine soviético, las películas de Serguéi M. Eisenstein, Dziga Vertov y Alexandre Dovjenko propusieron un héroe colectivo, el proletariado, y se inventaron un estilo narrativo —el llamado “montaje de atracciones”, el “cine-ojo” y las simpatías constructivistas— que se adecuaba a esa necesidad de dar protagonismo a la masa y prioridad a los intereses de la mayoría. Quiere ser un cine “de ideas” frente al cine “de sentimientos” que defienden los bien diferenciados individuos de cada drama o comedia estadounidense. En Europa, al mismo tiempo, los determinismos de todo tipo —sociales, religiosos, raciales, etc.— hacen difíciles los amores y gloriosas las tragedias.
Banquero de proximidad
En las grandes cintas populares de Frank Capra, en sus comedias de espíritu roosveltiano, aparece a menudo James Stewart como pequeño banquero. ¿Qué significa “pequeño banquero”? Sencillamente, es una banquero “de proximidad”, que conoce los negocios, las necesidades y virtudes de quienes le piden dinero, que presta a un interés moderado, nunca desahucia y acepta que los pagos se retrasen. John Barrymore acostumbra a encarnar otro tipo de banquero, el financiero, que no quiere que los otros hagan “cosas” —modernizar la tienda, pintar el restaurante, comprarse un tractor, etc.— sino quedarse con todo. En It’s a Wonderful Life (1946) Capra le da una dimensión dramática que necesita de la ayuda del cielo para acabar bien a lo que en You can’t take it with you (1938) aún aparecía como una fábula amable. Es interesante que Capra, en la primera de las dos citadas, muestre a Stewart lo que sería su pueblo si él —su personaje— no hubiera existido. ¡Nunca se ha hecho un mejor elogio del individualismo! En 1985, en Back to the Future, Robert Zemeckis recupera la artimaña.
El crash del 29 no supone la primera irrupción en la pantalla de la realidad económica y laboral más desastrosa. Queda dicho que los soviéticos fueron pioneros en la materia aunque las cámaras de medio mundo, con curiosidad morbosa, piedad cristiana, ánimo de denuncia o mera voluntad de negocio, ya habían filmado antes a obreros sin trabajo, agricultores arruinados, víctimas de hambrunas y también diversos tipos de marginado social, con especial predilección por las prostitutas. Pero es la Administración de Roosevelt la que da dignidad a los perdedores. Las víctimas, los perdedores de la crisis, son los elegidos por la ficción roosveltiana. Si en los EE UU de hoy los arruinados son asimilados a los tontos, obesos, negros, gandules y estúpidos —apenas exagero—, en las cintas de la Warner Bross el fracaso iba ligado a la suerte o a no haber nacido con la cuchara de plata en la boca.
Los causantes de la crisis
En Margin call e Inside job, ambas de 2011, vemos y oímos a quienes han causado la crisis, a financieros y hackers, y tenemos la sensación de que el resto del mundo no existe. Los millones se volatilizan, pero eso se debe más a errores informáticos que al hecho de jugar con una riqueza inexistente. Son muy buenas películas, pero la primera casi se apiada de sus rapaces, banqueros frios y desalmados que, sin embargo, lloran cuando se les muere el perro. Que el mundo estaba cambiando hubiéramos debido intuirlo en 1985, cuando un broker interpretado por Mickey Rourke conseguia transformar en una mujer sumisa a Kim Basinger en Nine ½ Weeks. El dinero fácil tenía sexo y glamour.
El cine de hoy, el cine de ficción o los mejores documentales, los rodados con más medios, prefiere los estafadores a los estafados. Son más guapos o, cuando menos, van mejor vestidos. De la misma manera que hoy apenas es posible hacer carrera como cantante o músico solo con tu voz o con tu talento para la digitación y hace falta un buen corte de pelo, una falda abierta sobre un muslo firme o un torso de campeón olímpico para que tus canciones tengan éxito, en el cine son pocos los tipos con aspecto de obrero “de verdad” que son contratados o, simplemente, filmados por los cineastas.
Durante la breve primavera-verano del Front Populaire francés, bajo el tormentoso cielo republicano español, a finales de los cincuenta en la Gran Bretaña harta del conservadurismo bipartidista, durante unos pocos años en Suecia, en los márgenes de la industria en Japón o en EE UU, en los albores de la URSS, en diversos momentos los objetivos de las cámaras se han fijado en esos personajes de quienes se dijo que encarnaban “el sentido de la historia”, pero ahora se les niega la condición de sujetos activos. Al final, tal como sucedía en el film de Luis García Berlanga Los jueves milagro, cuando había que recurrir a la población autóctona para llenar las calles, era otra realidad la que subía a la pantalla y los actores profesionales, más o menos viejos, más o menos maquillados y customizados, eran reemplazados por gente mal alimentada, de gesto brusco y poco elegante, de todas las edades, de dentaduras mal alineadas, trajes o ropas de corte precario y cabezas recién rapadas. Ellos, en su brusca irrupción, no nos decían que “otro mundo es posible” sino que ese “otro mundo ya existe” aunque, eso, para algunos, signifique una pesadilla.
Margin call.
BREVE SELECCION
Modern Times (Tiempos Modernos)
Director: Charles Chaplin 1936
Reparto: Charles Chaplin, Paulette Goddard, Henry Bergman, Chester Conklin, Stanley Stanford, Hank Mann, Louis Natheaux, Allan Garcia
It’s a wonderful life (Qué bello es vivir)
Director: Frank Capra 1946
Reparto: James Stewart, Donna Reed, Lionel Barrymore, Thomas Mitchell, Henry Travers,Beulah Bondi, Frank Faylen, Ward Bond, Gloria Grahame, H.B. Warner, Frank Albertson, Todd Karns, Samuel S. Hinds, Mary Treen, Virginia Patton, Charles Williams, Argentina Brunetti
You can’t take it with you (Vive como quieras)
Director: Frank Capra 1938
Reparto: James Stewart Jean Arthur, Lionel Barrymore, Edward Arnold, Mischa Auer, Ann Miller, Spring Byington
Back to de future (Regreso al futuro)
Director: Robert Zemeckis 1985
Reparto: Michael J. Fox, Christopher Lloyd, Lea Thompson, Crispin Glover, Claudia Wells,Thomas F. Wilson, Billy Zane, Sachi Parker
Margin Call
Director: J.C Chandor 2011
Reparto: Kevin Spacey, Paul Bettany, Jeremy Irons, Zachary Quinto, Penn Badgley, Simon Baker, Mary McDonnell, Demi Moore, Stanley Tucci
Inside Job
Director: Charles Ferguson 2010
Reparto: Documentary, Barney Frank, Charles Morris, Daniel Alpert, Dominique Strauss Kahn, Glenn Hubbard, Eliot Spitzer, George Soros, Christine LaGarde, Jeffrey Lane,Kenneth Rogoff, Lawrence McDonald, Martin Feldstein, Harvey Miller, Michael Greenberger
Nine ½ weeks (9 semanas y media)
Director: Adrian Lyne 1986
Reparto: Kim Basinger, Mickey Rourke, Margaret Whitton, Christine Baranski, Karen Young,Dan Lauria
Los jueves milagro
Director: Luis García Berlanga 1957
Reparto: José Isbert, Richard Basehart, Paolo Stoppa, Alberto Romea, Juan Calvo, José Luis López Vázquez, Félix Fernández, Manuel Alexandre, Mariano Ozores, Félix Briones
La Gran Depresión de los años treinta en Estados Unidos produjo migraciones masivas y millones de desplazados en busca de empleo
El crimen organizado puede corromperlo casi todo: está integrado en las estructuras económica y de poder
En un siglo el trabajo ha pasado de mitificación a convertirse en un bien escaso y raro
Scarlett O’Hara, alzando el puño a un cielo rojizo, es una imagen icónica de cómo rehacerse ante la adversidad.
La realidad supera a la ficción cuando de lo que se trata es simplemente de ganar dinero. Nada importa. Nadie importa.
La historia se ha nutrido de revueltas y revoluciones, cuya raíz procede de “volver”: los mineros del siglo XIX protestando ahora tras la limusina
La música tiene una gran fuerza evocadora y ha desempeñado un papel central en el retrato de las crisis
La crisis de Estados Unidos de los años treinta alcanzó rápidamente a los países europeos y a Japón
En la mayoría de películas, incluso en medio de la crisis más grave, ellas acostumbran a aparecer como el sostén de la familia
La crisis no ha inspirado demasiadas ficciones aquí, pero sí algunos retratos muy precisos
Un recorrido por las películas y series que mejor han retratado la industria periodística, la profesión y las luchas de ahora que ya no somos capitanes
Recibe cada mes la revista en casa y ten acceso a todos los contenidos online.